Nissan ha comenzado una gran ofensiva eléctrica dentro de su gama. Los que fueron uno de los pioneros dentro de este segmento con el Leaf, van a lanzar próximamente a su sucesor en formato SUV, acompañándole con el Juke y un pequeño urbano con mucho en común con el Renault Twingo. Aunque antes de todos estos llegará el mercado el último Micra, que en su sexta generación abandona por completo los motores de combustión.
Como casi todo el mundo sabe, nuestro protagonista japonés ha compartido desarrollo con el Renault 5. Ambos se asientan sobre la plataforma AmpR Small y en el caso del francés está consiguiendo unas cifras de ventas muy buenas, dentro de lo que es este particular segmento. Por ejemplo, en España ha matriculado ya 3.017 unidades, lo que le vale para ocupar el cuarto puesto total. Y claro está, el Micra querrá ahora acercarse o incluso superar esas cifras.

Una personalidad propia para cada uno
Uno de los primeros aspectos que se tiene que cuidar, a mi parecer, entre dos coches de marcas diferentes que comparten desarrollo es su imagen exterior. Ya sabemos que existen a lo largo de la historia del automóvil ejemplos de modelos en los que apenas se intercambia el logo, pero creo que un cambio más notable ayuda a que ambos puedan vender en una mayor cantidad.
Sobre el Renault, por empezar por orden de llegada, ya hemos escrito mucho sobre su diseño “neoretro”. Los diseñadores franceses han sabido trasladar muy bien a base de varios guiños la esencia de los R5 y Supercinco originales para adecuarlos al estilo moderno de nuestros tiempos. Y la respuesta no ha podido ser mejor para un modelo que creó mucha expectación incluso antes de ponerse a la venta. Sobre esta propuesta desde Japón (aunque en realidad se creó en el centro de diseño ubicado en Londres) proponen unas formas unas poco más redondeadas, fíjate en los faros, buscando parecerse a las primeras generaciones del utilitario asiático.

A partir de aquí, la carrocería, y por lo tanto las proporciones, son idénticas entre nuestros dos protagonistas. Los dos modelos comparados cuentan con una longitud de 3,97 metros, muy idónea para la ciudad, así como una anchura de 1,77 metros y una altura de 1,49 metros. Y si quitamos la parte alta formada por las lunas o el techo, el resto de las piezas de chapa son diferentes.
Más difícil ha sido disimular las similitudes entre ambos en el interior. Partiendo de un habitáculo que ofrece el mismo espacio, ya sea para los ocupantes o para el maletero, se echa de menos un poco más de espacio para las piernas en las plazas traseras o en altura, algo que no pasa con los asientos delanteros que son más cómodos. En términos de digitalización comparten el buen sistema basado en Android Automotive (el segundo Nissan que lo equipa tras el Qashqai), que les aporta una ventaja sobre alguno de sus competidores.

A partir de aquí las atmosferas creadas con la combinación de colores, asientos y tapicerías dejan claro sus divergencias. En el R5 se apuesta, como sucedía con el exterior, por un toque más claro hacia lo “vintage”, como podemos apreciar en las líneas que aparecen delante del copiloto. Mientras, en el Micra tiene un toque más moderno.
El Renault tiene más motores que el Nissan
Por ahora, al menos con la estrategia de lanzamiento que nos han anunciado para el Micra, el R5 comparte con él dos opciones mecánicas, aunque se reserva una con la que, como veremos más adelante, puede ofrecer un precio de acceso mucho más económico que su rival en esta comparativa.

A modo de repaso, ambos cuentan con una batería de partida de 40 kWh de capacidad que se combina con el motor de 90 kW (122 CV). Con ella el Nissan ha conseguido homologar 319 kilómetros, mientras que el Renault se conforma con 312 km. Sobre esa misma pila es la que este último ofrece como alternativa otro motor de 70 kW (95 CV), cuyo rango es de 310 kilómetros
Por encima se puede escoger una batería mucho más capaz, pues ya alcanza los 52 kWh y que de paso viene acompañada por un motor más potente que declara 110 kW (150 CV). Y aquí de nuevo se repite la misma historia que antes, pues el Micra declara 419 kilómetros con el mismo sistema, por los 412 del Renault.

Con los precios terminamos esta comparativa. Como señalaba antes, el hecho de contar con esa versión base de 70 kW (95 CV) permite al R5 anunciar un precio de partida de 23.971 euros. Aún con esto, y siempre contando con el acabado más bajo, el R5 es 850 euros más barato con la batería de 40 kWh y 1.100 euros con la de 50 kWh.