Junto con el Nissan Qashqai, el Juke fue uno de los grandes protagonistas en el incipiente crecimiento de los SUV. Ahora se podría decir que ha perdido algo de protagonismo, ya que su competencia se ha vuelto muy mayoritaria y llega de todas las partes del mundo, pero el japonés sigue demostrando unas buenas maneras en carretera que pocos alcanzan.
Renovado el pasado año con ligeros retoques exteriores y una gran remodelación interior, el Juke seguía manteniendo en su oferta un motor de gasolina acompañado por otro Hybrid que le permite ofrecer etiquetas C y Eco, las más demandadas actualmente. Y nosotros le hemos querido someter a nuestra particular Guía de Compra para descubrir cuál es su mejor configuración.
Así es el actual Nissan Juke
No se podrá negar que la esencia estética del primer Juke, aquel que rompió en el segmento de los B-SUV, se sigue manteniendo actualmente. Como indicaba antes, el pasado año se le modificó ligeramente la parrilla, además de incorporar nuevos juegos de llantas o colores para la carrocería, como suele ser habitual en los restyling. Aunque con los últimos hay que hacer una puntualización, pues volvía el color amarillo que tan popular fue en la primera entrega.
Aunque para mí el gran avance en este Juke lo encontraremos en el interior. Partiendo de una estructura parecida en el puesto de mando, ahora ha llegado una pantalla multimedia que supera en mucho a la anterior. Como indico en el vídeo la mejora es notable en casi cualquier aspecto importante que se puede pedir, como los gráficos, la velocidad en las transiciones, la posibilidad de contar hasta con el asistente de Alexa o una cámara de visión trasera (no disponible en todos los acabados) cuya mayor resolución se nota mucho cuando se utiliza. Con 12,3 pulgadas su tamaño es muy generoso y además está orientada unos grados hacia el conductor, para consultarla mejor. A su lado, con idéntica medida un panel de instrumentación que deja a Nissan muy bien frente a sus competidores, con dos vistas, una interfaz clara y moderna, así como la posibilidad de revisar bastantes datos.

Otro aspecto para valorar es la mejora realizada en la consola central. Ahora se podrán colocar móviles de un mayor tamaño en su cargador inalámbrico, creciendo también el hueco ubicado debajo del reposabrazos, así como la superficie de este último. Todo ello aderezado, en este acabado Tekna, con unos asientos de aspecto deportivo y tamaño grande, que van un poco altos como buen SUV. Desde ellos contemplé que la visibilidad trasera sigue siendo reducida, algo que ha pasado siempre en este coche, y que se ha dejado un gran espacio para las piernas del copiloto.
Y tras las alabanzas llegaría el apartado de mejoras. En mi opinión el que se trate de un acabado Tekna, el más alto de la gama, debería contar con materiales de más calidad, además de unos mejores ajustes. Por no hablar de un climatizador de dos zonas. Luego encontramos algunos mandos en puertas ya clásicos, aunque el salpicadero en conjunto está bien ordenado.

Comentario aparte merece el sistema de sonido creado por Bose para este Juke. Sé que no está disponible en todos los acabados, pero a mí personalmente me ha encantado. A los altavoces habituales se unen los colocados en los reposacabezas de los asientos delanteros, que crean una atmosfera circular a tu alrededor en la que la música se escucha muy bien. Aunque para notarlo de verdad hay que subir un poco el volumen, pues a decibelios bajos casi ni se aprecia. Lo único es que deja sin altavoces a las puertas traseras, en donde la marca ha colocado una preinstalación, pero no un emisor de sonido.
Al pasar a las plazas traseras me encuentro los tiradores de las puertas en posición superior y ya sabéis que no soy muy amigo de esta solución. Más allá de este detalle, es un coche que ofrece un espacio aceptable para las piernas de los pasajeros de esta zona, aunque tanto en altura como en anchura es superado por varios de sus rivales directos.

Respecto a su maletero, dispone de una boca de carga alta, solo unos centímetros por debajo del Renault Captur con el que comparte plataforma y que tampoco destaca por ello. Su espacio, como suele ser habitual en los modelos actuales, cambia según el motor escogido. Para el gasolina de acceso son unos buenos 422 litros, aunque en el caso del Hybrid se queda en unos aceptables 354 litros.
Con etiqueta Eco por bandera
En concreto mi unidad de pruebas tenía con el motor Hybrid, un híbrido sin enchufe para que todos nos entendamos. Compartido con el citado Captur, cuenta con una potencia de 143 CV y, lo que es mejor, una etiqueta Eco en su parabrisas que actualmente está muy demandada.

Cuando circulamos por ciudad intenta lo máximo posible circular en modo eléctrico, pero el de combustión se enciende bastante porque tiene como misión ir rellenando la carga de la batería. Solo cuando completamos un buen rato en estas condiciones es cuando podrás comprobar que se para por completo. Por este funcionamiento en trayectos muy cortos los consumos no suelen salir bajos.
La entrada en acción del motor de combustión cuando actúa como generador se nota bastante dentro del habitáculo, no es muy refinado e incluso introduce vibraciones al pedal del acelerador. Lo bueno es que como actúa muy rápido, si vas soltando de vez en cuando el pie derecho se apaga rápidamente y se hace el silencio.

Si eres de lo que te gusta participar en el funcionamiento del sistema de propulsión del coche, con el Juke tienes varias posibilidades. Por ejemplo, puedes forzarle a que ruede en modo completamente eléctrico, siempre y cuando no superes los 55 km/h. Luego tiene el botón e-Pedal heredado de los eléctricos de la marca, que resta algo de empuje al acelerador y aumenta la frenada regenerativa que casi llega a parar el coche por completo. Sobre esta, de normal también la utiliza, pero no de una manera brusca. Y por último tenemos los modos de conducción (Eco, Standard y Sport), siendo el último el que más se nota, mientras que con el primero intenta circular lo más posible sin emisiones.
Eso sería un resumen de su comportamiento como urbanita, pero llega el momento de sacar “a pasear” a este Juke. Y aquí, aunque en la ficha técnica indique que cuenta con 143 CV combinados, creo que le falta algo de contundencia a este motor. Para mí el chasis de este SUV está por encima de la mecánica, por lo que aguantaría más potencia sin problemas, pues luego presume de una buena dinámica, con un buen ajuste tanto de la dirección como de los frenos.

Cerramos este apartado con los consumos, aunque si ya has visto el vídeo de arriba te habré hecho “spoiler” como se dice ahora. En varios recorridos por mi ciudad he comprobado que el Juke se establece un poco por encima de los 5 litros, cifras que me parecen muy buenas dentro de su segmento. Una vez que le pedimos un poco más de exigencia (rodar a 90-100 km/h) vemos como ya sube a 5,7-5,8 litros, aunque la diferencia más notable es en vías rápidas, con cifras ligeramente superiores a los 7 litros. Y como dato final, al devolverlo el ordenador de a bordo marcaba una media total de 6,3 litros.
¿Cuál es el mejor motor y acabado para el Nissan Juke?
Llega el momento de escoger el Juke que nosotros creemos que es el más idóneo. Respecto a los motores queda claro que la elección es entre dos candidatos, el gasolina de 114 CV o el Hybrid arriba analizado de 143 CV. Y creo que aquí lo tengo bastante claro, teniendo en cuenta que la diferencia a igualdad de equipamiento está entre los 1.500 y los 1.900 euros (según el acabado que escojas), me decantó de cabeza por nuestro protagonista. Mejores consumos, más prestaciones y etiqueta Eco son razones más que de peso para optar por él.

Con los equipamientos tengo muchas más dudas. En concreto el SUV japonés ofrece actualmente hasta cinco posibilidades, por lo que es de los más ricos en este aspecto. De primeras me quitaría el Acenta, en el que digamos va un poco más pelado dejando su precio en 26.000 euros (motor Hybrid), también el Tekna (28.550 euros) e incluso el más caprichoso Ikon Edition (29.470 euros), a menos que mueras por el color amarillo.
Nos quedan por tanto el N-Connecta (26.200 euros) y el N-Design (27.300 euros). El precio del primero es la principal razón de descartar el Acenta, y sería una opción muy válida para este Juke. Aunque creo que la diferencia con el segundo no es muy grande y cuenta con algún equipamiento interesante como la pantalla de instrumentación grande o la posibilidad de elegir una pintura en dos tonos.

Los principales rivales del Nissan Juke
Que duro y competido está el segmento en donde se encuentra el Juke. Con tu permiso vamos a afinarlo un poco hacia aquellos que cuentan con una mecánica híbrida estilo de la aquí analizada. Y está claro que el primero que sale a la palestra es el Renault Captur, para mí un poco superior en cuanto a la presentación del puesto de mando. Con su acabado de acceso Evolution se queda en 26.665 euros, muy parecido al N-Connecta del Nissan. Incluso podríamos meter en la ecuación al Mitsubishi ASX, pero el otro nipón de la Alianza es mucho más caro (31.890 euros) al ofrecer este motor en sus acabados más altos.
Aunque si hablamos de modelos híbridos no podemos olvidarnos de la alternativa de Toyota. El Yaris Cross parte de los 27.300 euros y consigue unos consumos urbanos mejores. Eso sí, su habitáculo es más pequeño, solo logrando imponerse en la cota de altura. Mucho más caro es el Honda HR-V, de dinámica buena como el Juke, pero que de partida ya exige 32.460 euros.

Otras alternativas en formato híbrido sin enchufe podrían ser el Suzuki Vitara Strong Hybrid (28.397 euros) o el Peugeot 2008 (24.990 euros).