Está claro que la atención de BMW en general, como también de su gama SUV, está puesta en este final de año. Probablemente con el Salón de Múnich como escenario privilegiado se podrá contemplar por primera vez el primer coche que nacerá bajo el mantra de la “Neue Klasse”, que no es otro que el iX3. Pero mientras se prepara esa presentación o la llegada de otros modelos inminentes como el próximo Serie 3, en las oficinas de la firma alemana se encuentran a pleno rendimiento para renovar a sus SUV más grandes.
Nuestros compañeros de Carscoops han captado ya en varias ocasiones al futuro X5 rodando, con mucho camuflaje, en carreteras abiertas. Hay que recordar que la actual generación se empezó a comercializar en febrero de 2023 en nuestro país, por lo que se empieza a apuntar que su quinta generación (la G65) podría comenzar a fabricarse en el verano de 2026.
Otros medios como WardsAuto han informado que este nuevo X5 utilizará la plataforma CLAR, que sería una evolución de la actual para poder adaptarse de la mejor forma a todas las novedades que traerá la Neue Klasse. De esta manera, también se dará la bienvenida al primer iX5, que estará acompañado por una gama completísima de motores con opciones de gasolina, diésel, híbrido enchufable e incluso, se atreven a vaticinar una de hidrógeno, algo que ya tiene el actual.
Ahondado más sobre esta variante eléctrica, que al final es la más novedosa por no encontrarse ahora mismo disponible para el SUV, según la misma publicación desde BMW creen que podrá disponer de una densidad energética un 20% mayor, así como un aumento del 30% en la autonomía y también en la velocidad de carga de la batería, comparado con la tecnología que se vende actualmente en la firma teutona. A esto habría que sumar que estiman que se podría conseguir una reducción del 40% en la pérdida de energía, lo que implica que serán modelos mucho más eficientes.

De ahí saltamos al X7, el buque insignia en materia SUV de BMW. En su caso es un poco más antiguo que el anterior, pues su restyling fue presentado en mayo de 2022, pero dado en el segmento que se encuentra puede aguantar un poco más en el mercado. Comento esto porque su llegada está prevista ya para 2027 y lo normal sería que muchas de las novedades que estrene el X5 (comparten plataforma) sean transferidas al “grandullón”.
Al que los analistas están poniendo más en duda es al X6, del que dicen que está cosechando ventas modestas a nivel mundial. En nuestro mercado si es verdad que se queda por debajo del X5 (571 frente a 341 unidades en este 2025), pero a diferencia de ese cuenta con un crecimiento en el conjunto anual del 2,10%. En caso de seguir, es posible que copiara una estrategia de motorizaciones muy parecida a las arriba mencionadas, con lo que aparecería ya un iX6 de cara al 2028, aunque no creemos que en este caso se apueste por el hidrógeno.

La idea que tiene BMW es que estos tres modelos mantengan su fabricación en la planta estadounidense de Spartanburg (Carolina del Sur). En dichas instalaciones se ha decidido invertir 1.000 millones de dólares (880 millones de euros) para las adaptaciones necesarias para el desarrollo de estas nuevas generaciones, así como otros 700 millones de dólares (unos 613 millones de euros), en otra que fabrica baterías, cercana a la anterior.