El Lexus ES cuenta con una dilata historia que se remonta a 1989 y nada menos que siete generaciones a sus espaldas. Aunque quizás para el público español no sea un modelo reconocido, pues se empezó a comercializar en nuestro país en 2019, como demuestras unas cifras modestas el pasado año con 399 unidades matriculadas (este año lleva 139 en los cuatro primeros meses).
Pero pese a esto, y teniendo en cuenta que las berlinas de representación tampoco pasan por su mejor momento, Lexus acaba de presentar la octava generación del ES. En realidad, ya la vimos por primera vez en el Salón de Shanghái de este año, por lo que ahora se han confirmado sus especificaciones para el mercado europeo y se ha señalado que llegará en la primavera del 2026 a los concesionarios.

Así es el nuevo Lexus ES
La base sobre la que se asentará este nuevo ES se trata de una versión mejorada de la plataforma TNGA GA-K, que también es utilizada en los últimos Toyota RAV4 y Camry. En concepción se pensó que era mejor agrandar todavía más su carrocería, alcanzando ya unos considerables 5,14 metros, lo que son casi 17 cm más que el anterior. De paso ha ganado otro 5 cm de anchura (1,92 metros) y otros 11 cm en altura (1,56 metros).
Teniendo en cuenta estos datos, sus principales rivales dentro de las marcas premium alemanas serían el BMW Serie 8 Gran Coupé (5,08 metros), el Mercedes Clase S (5,17 metros) y el Audi A8 (5,19 metros). Sin olvidar que dentro de la propia marca se sigue comercializando el Lexus LS que alcanza los 5,23 metros.

En cuanto a su diseño, el cambio es bastante evidente con una silueta bastante aerodinámica. Tomando como referencia al prototipo LF-ZC, de finales de 2023, recoge de él algunas soluciones estilísticas, destacando el frontal en el que se ha reinterpretado la parrilla anterior. En cambio, en la zaga adopta una imagen más convencional de berlina, en donde destaca la nueva franja luminosa que ocupa todo el ancho.
De cara al interior se ha seguido un poco la tendencia de los coches del mercado chino, en donde prima el minimalismo frente a las propuestas más tecnológicas de sus rivales europeos. De esta manera, los numerosos botones que antes encontrábamos en el salpicadero ahora han desaparecido. En su lugar aparecen pantallas de 14 pulgadas, para el sistema multimedia, así como otra de 12,3 pulgadas para el panel de instrumentación. Y en el volante se sustituye el logo de la marca por una inscripción del nombre.

Suponemos que el espacio en las plazas traseras seguirá siendo majestuoso como sucede en la generación actual, ya que la distancia entre ejes se ha aumentado en otros 8 cm para alcanzar los 2,95 metros. Dichos asientos son reclinables, calefactados, ventilados y con función de masaje, para unos viajes totalmente placenteros.
Respecto a sus motorizaciones, este nuevo ES abordará un cambio significativo. Comento esto porque ahora contará con dos mecánicas totalmente eléctricas. La primera de ellas es el 350e con 165 kW (224 CV) y una autonomía de 530 km homologados gracias a una batería de 77 kWh de capacidad. Por encima quedará el 500e, con tracción total y 252 kW (343 CV), con una batería más pequeña de 75 kWh. Y a esta pareja sumará la 300h, un híbrido convencional con 201 CV de potencia, disponible con tracción a dos o cuatro ruedas.

Teniendo en cuenta que todavía quedan muchos meses para la llegada de este ES se antoja muy pronto para poder conocer su gama o sus precios. Pero para que nos pueda servir como una referencia, la berlina japonesa actualmente comienza en 58.000 euros con su acabado Premium y su motor 300h de 218 CV.