Malos tiempos corren sin duda para los conductores en España. Las normativas medioambientales y las nuevas leyes de cambio climático amenazan ya la libertad de movilidad hasta el punto de preverse ya, no solo fuertes restricciones para la circulación de coches que no sean considerados ecológicos, sino incluso nuevas tasas por querer conducir entre calles urbanas congestionadas o concurridas.
Así, al menos, lo aseguro hoy el diario La Razón, adelantando que el Grupo Socialista ha presentado ya una enmienda al Proyecto de Ley de Movilidad Sostenible en el Congreso de los Diputados que deberá ser tramitada y que aboga por permitir que los ayuntamientos tengan ya la posibilidad de cobrar tasas a los vehículos por circular por determinadas calles de las ciudades que estén demasiado congestionadas y concurridas. Es, de nuevo, un intento por habilitar lo que se conoce como peajes urbanos, que se llevan años vislumbrando desde el Gobierno y que ya se aplican en importantes ciudades del mundo.
Los ayuntamientos podrían decidir si aplicar nuevas tasas por circular por calles concurridas
Así, tras el rechazo en el Congreso hace unos días del denominado impuesto al diésel que preveía incluir la reforma fiscal del Gobierno, una medida que sin embargo ya te contamos que sigue en marcha y que podría finalmente aprobarse a finales de año en un nuevo proyecto de ley que se está pactando entre varios socios parlamentarios, esta nueva opción de tasa a los conductores podría convertirse en un nuevo gravamen que sufrirían los conductores.

De aprobarse esta enmienda, algo que no parece fácil ya que debe contar con un amplio consenso en el Congreso de los Diputados, la iniciativa seguiría los pasos de las Zonas de Bajas Emisiones, que en realidad son una herramienta aprobada desde el Gobierno para que los ayuntamientos decidan qué vehículos son los que tienen en cada municipio restricciones o no. En este caso, de igual modo, serían los consistorios los que decidirían si aplicar o no estas nuevas tasas.
Presentada por el Grupo Parlamentario Socialista, esta nueva enmienda que obviamente cuenta con el respaldo del Gobierno, del mismo partido político, pretende que los ayuntamientos tengan la capacidad de delimitar, al margen de sus Zonas de Bajas Emisiones, una serie de zonas de la ciudad catalogadas como concurridas y que notifiquen a través de una ordenanza municipal cuáles son las calles seleccionadas, tal y como informa hoy La Razón.
Fuentes del Gobierno habrían asegurado a este diario nacional que esta ley tiene ya como objetivo “establecer las condiciones necesarias para que los ciudadanos y ciudadanas, así como las entidades públicas o privadas puedan disponer de un sistema de movilidad sostenible, justo e inclusivo como herramienta para lograr una mayor cohesión social y territorial, contribuir a un desarrollo económico resiliente y alcanzar los objetivos de reducción de gases de efecto invernadero y otros contaminantes y mejora de la calidad del aire”.

El precio sería similar al establecido por aparcar en párkings privados
La enmienda prevé que los ayuntamientos puedan cobrar a los conductores que circulen por estas calles concurridas seleccionadas una tarifa similar a los precios por ejemplo establecidos por aparcar en los párking privados de estas mismas zonas, lo que sin duda no sería una tarifa demasiado económica.
Desde el Grupo Parlamentario Socialista justifican también esta iniciativa con el argumento de que estos espacios públicos tan concurridos son compartidos, no solo por conductores de turismos y furgonetas, sino también por usuarios de bicicletas, patinetes o peatones. El pretexto que asegura La Razón es que hoy estas calles suponen un beneficio para los vehículos de cuatro ruedas, “en detrimento de los otros usuarios que concurren en el espacio público”.
Queda por ver ahora si el Congreso ratificará esta nueva enmienda al Proyecto de Ley de Movilidad Sostenible o si, como ocurrió hace unos días con el intento de equiparar la tributación del diésel al de la gasolina, tumba de nuevo otra propuesta que prevé nuevas tasas para los conductores. ¡Os lo contaremos!