Poco a poco, los coches urbanos baratos están desapareciendo de las calles de muchas ciudades. Una desaparición que responde sobre todo a una legislación cada vez más estricta, pero también a la llegada de marcas chinas con coches mucho más asequibles que los producidos por los fabricantes europeos.
Luca de Meo, ya ex CEO del Grupo Renault, y John Elkann, presidente de Stellantis, han dado la voz de alarma por la paulatina desaparición de los coches pequeños y baratos y piden ya la colaboración de toda la industria europea para fabricar de nuevo coches de pequeño tamaño y de precio más asequible. Según Elkann, Europa ha pasado de vender un millón de coches nuevos por debajo de los 15.000 euros al año, a apenas 100.000 unidades. Para el máximo responsable de Stellantis, las regulaciones de la Unión Europea están matando a los coches pequeños, cada vez menos rentables de fabricar.
“Si Japón tiene su kei car, Europa también debería”
Ha sido precisamente John Elkann el que apuesta por importar en Europa una fórmula similar a los kei car japoneses. “El 25% de nuestros ingenieros trabaja exclusivamente en el cumplimiento normativo”, ha asegurado Elkann en una entrevista. “Eso no añade ningún valor al producto. Si Japón tiene su segmento Kei, que representa el 40% de su mercado, Europa debería tener su E-Car”.

Los Kei Cars japoneses son vehículos muy pequeños y ultraligeros que dominan las ciudades japonesas por su bajo coste, tamaño reducido y beneficios fiscales. Aunque sus diseños son un tanto peculiares, con carrocerías de formas muy cúbicas, tipo monovolumen, en apenas 3,5 metros de longitud, incluso menos, pueden dar cabida a hasta 5 ocupantes, gracias a ingeniosas fórmulas para el aprovechamiento al máximo del espacio.
Y una fórmula similar para Europa es la que están pidiendo ya Stellantis y Renault: una nueva categoría que permita desarrollar coches eléctricos compactos y asequibles, pensados para las ciudades y para las tareas de reparto de última milla.
La propuesta de Renault: una regulación distinta para los coches pequeños
Antes de su inesperada renuncia esta misma semana como CEO de Renault, Luca de Meo también ha pedido una profunda revisión de la normativa que afecta a los vehículos ciudadanos más pequeños. En palabras de Luca de Meo, “Conducir a diario un vehículo eléctrico de 2,5 toneladas es un sinsentido ambiental”. Es más, de Meo ha hecho un llamamiento a Francia, España e Italia para liderar la creación de un marco normativo diferente para coches pequeños.

Luca de Meo ha explicado que “Actualmente hay demasiadas regulaciones pensadas para coches grandes y caros y eso impide que podamos fabricar coches pequeños con unas condiciones de rentabilidad aceptables”.
La apuesta de Stellantis por los microcoches
Stellantis es uno de los pocos fabricantes que, a pesar del complicado panorama de regulaciones en Europa, sigue apostando por coches de pequeño tamaño como el Citroën Ami, el Opel Rocks-e o el Fiat Topolino. Estos modelos encajan dentro de la categoría de los cuadriciclos, que permite vehículos ultraligeros, muy pequeños y de baja velocidad.
El regreso de los coches pequeños y baratos va a depender de una nueva legislación que esté más adaptada a sus particulares características, ya sea redefiniendo la normativa de los vehículos cuadriciclos o creando una categoría completamente nueva, la de los denominados E-Cars.