El pasado mes de julio llegó con numerosas novedades en lo que se refiere a las ventas de coches. Si bien Toyota y el Dacia Sandero, en sus correspondientes clasificaciones, siguen sin dar tregua a ninguno de sus rivales, hemos sacado conclusiones bastante interesantes de los pasados 31 días que tendremos que comprobar si se confirman más adelante.

Una de ellas fue el ascenso del Kia Niro al top10 de los coches más vendidos. Con 1.502 unidades matriculadas, el SUV de tamaño medio ha vivido siempre a la sombra del Sportage, habitual siempre en estas primeras posiciones, y del Stonic, al que ya le van pesando el paso de los años. Por este motivo, hemos querido analizar cuáles son las claves del éxito del modelo coreano.
1. Un diseño arriesgado
En muchas ocasiones se tacha a las marcas de bastante conservadoras en sus diseños. La frase “es que todos los coches son iguales” es muy definitoria y se puede escuchar mucho en la calle. Y quizás es algo que le pudo pesar en cierta manera a la primera generación del Niro, que se lanzó en 2016 y estuvo vigente hasta el 2022 que se presentó el modelo actual.

Aquel Niro de alguna manera todavía tenía ciertos rasgos que la acercaban bastante a los extintos monovolúmenes, algo que ya no estaba de moda, y pese a que no tuvo malas cifras en nuestro mercado, no llegó a moverse en los niveles del actual. Porque ahora las líneas del SUV coreano son bastante arriesgadas, como las de su hermano mayor el Sportage, pero con las cifras de ventas en la mano bastante acertadas. Y a mí personalmente me gusta mucho el detalle del pilar C pintándose en otro color de la carrocería para ofrecer contraste y un elemento personal a la vez que diferenciador entre sus rivales.
Del puesto de mando podríamos decir casi lo mismo, pues si bien en su primera generación estaba bien dotado de pantallas con lo último en conectividad, ahora apuesta por formas más atrevidas, detalles de diseño como el selector circular de la consola central o una pequeña reducción de botones, aunque todavía siguen ofreciendo muchos más que algunos de sus competidores.

2. Motorizaciones de moda
La primera generación del Niro se comercializó entre 2016 y 2022, que fue cuando llegó la actual. En su momento fue totalmente pionera para la marca pues se convertía en su primer modelo en el que se ofrecían simultáneamente mecánicas de tipo híbrido, híbrido enchufable y eléctrico, al estilo de lo que hacía su marca hermana con el Hyundai Ioniq.
Quizás en esos años el mercado todavía dejaba de lado un poco estos propulsores que llegaban con etiquetas Eco y 0 emisiones, pero teniendo en cuenta lo que ha cambiado la normativa últimamente, en los últimos años ha subido mucho el interés por tener alguna de esas pegatinas sobre la luneta delantera.

A grandes rasgos, la mecánica híbrida de este Niro, conocida comercialmente como HEV, no ha tenido cambios con el paso de los años. Gracias a la acción de su motor de gasolina más otro eléctrico ofrece 141 CV, ideales para conductores de carácter tranquilo o aquellos que hagan muchos de sus kilómetros por ciudad. No sucedió lo mismo con la híbrida enchufable (PHEV) que en esta última entrega vio como ganaba 42 CV para situarse en 183 CV y además su nueva batería le permitía aumentar la autonomía eléctrica homologada hasta los 65 km, que son dieciséis más que en su antecesor.
Para el eléctrico o e-Niro, el menos vendido de los tres, se decidió en la segunda generación apostar todo por la mecánica más potente de 150 kW (204 CV), prescindiendo de la de 100 kW (136 CV). La batería mejoraba levemente su capacidad para alcanzar los 64,8 kWh, por lo que es normal que su autonomía eléctrica apenas aumentara cinco kilómetros para situarse en 460 km.

3. Un interior que cumple
Con 4,42 metros, el Niro es un coche muy válido para las familias. Como ya sucedía en sus orígenes, y dado ese aspecto más de monovolumen, ofrecía un habitáculo de los más amplios de su categoría. Eso se ha mantenido en la nueva entrega, a lo que tenemos que sumar un buen hueco de acceso de las puertas y una buena visibilidad.
Sobre el maletero, y como suele suceder en muchos coches del mercado, todo dependerá de la motorización que escojas de las anteriormente descritas. En el caso del Niro el mejor en este sentido es el eléctrico, que presume de 475 litros de capacidad. Bajaremos a los 451 litros en el caso del híbrido, diferencia que es poco notable, pero para el híbrido enchufable se queda en 348 litros.

4. Equipamientos claros y amplia garantía
Este último punto lo podríamos hacer extensible a toda la gama de Kia. Los coreanos no suelen complicarse a la hora de plantear sus opciones de equipamientos articulándolos en tres niveles: Concept, Drive y Emotion (los mismos que tenía su antecesor). Aunque como apunte actualmente el e-Niro tiene uno adicional denominado Winter Edition. De esta manera el comprador apenas tiene opcionales fuera de estas propuestas agrupados en dos packs (Design y Luxury) que hace más fácil la configuración del SUV coreano.
El último gran punto de este Niro es que ofrece de serie una garantía de 7 años o 150.000 kilómetros en cualquiera de sus versiones, lo que ofrece una gran seguridad para todos sus compradores.