Hace pocos días os anunciábamos la llegada de la actualización de la característica motorización e-Power para el Nissan Qashqai. Pese a ser un eléctrico de autonomía extendida, al SUV japonés se le engloba en la clasificación de ventas dentro de los híbridos y es allí donde encuentra un duro rival con el Renault Austral, ya que los dos fueron los dos modelos de su categoría más matriculados en el pasado mes de junio. Por ello vamos a compararlos.
Así será el nuevo e-Power del Nissan Qashqai
Como ya nos anunció Nissan hace unos días, el Qashqai recibirá próximamente una renovación de su motor e-Power. Esta mecánica modular “5 en 1”, en donde se integran propulsor eléctrico, generador, inversor, reductor y multiplicador, se ha conseguido que ahora sea más compacta y sigue funcionando junto a la batería de 1,97 kWh de capacidad.

De paso, se ha aprovechado para mejorar la otra parte, la de combustión, que en el caso del SUV japonés es un bloque 1.5 turbo de tres cilindros. A este se le ha incorporado el sistema STARC, patentado por la marca, que ha optimizado varias piezas como son colector de admisión, una cámara de combustión y una forma del pistón para sincronizarse mejor con la fracción eléctrica.
Con todas estas modificaciones, a las que habría que sumar un turbocompresor más grande, permiten reducir la eficiencia térmica en un 42%, se prescinde de la tecnología de relación de compresión variable y se bajan las revoluciones del motor cuando se rueda a velocidades más altas, algo que hará aumentar confort acústico.

En resumen, la potencia aumentará hasta los 204 CV, siempre y cuando tengamos activo el modo de conducción Sport ya que de lo contrario se mantendrá en los anteriores 190 CV. Y sobre el consumo medio se espera pasar en homologación de 5,1 a 4,5 litros, por lo que podría alcanzar una autonomía de 1.200 kilómetros.
El Renault Austral responde con una renovación de su imagen
Para contrarrestar esa novedad mecánica del Qashqai, con el que por cierto comparte la plataforma CMF-CD, el Austral recientemente se ha renovado. Su estilo ahora se asemeja más al camino marcado por el Rafale y de que alguna manera ha llegado también al Espace, justo los tres modelos que salen de la línea de producción de la planta de Palencia.

Más allá de los cambios estéticos, el Austral también ha querido mejorar el funcionamiento de su mecánica híbrida. Siguiendo un poco la estela del japonés, se ha trabajado sobre su motor de combustión 1.2 de tres cilindros para incorporarle una nueva polea de cigüeñal y su tapa. Unido a un trabajo exhaustivo de aislamiento y unos retrovisores más aerodinámicos, se consiguen reducir hasta 8 decibelios en el interior.
También nos han transmitido desde la marca que se han incorporado nuevos soportes de motor y un cambio de la calibración de la hibridación, destacadas como las mejoras más notables por mi compañero Raúl Roncero que ya ha podido probarlo. Porque en cuanto a la potencia se sigue quedando en 200 CV, por lo que ofrece unas prestaciones parecidas a las de su rival, aunque con una forma distinta de entregarlo, ya que en el japonés impulsa la electricidad y en el francés la gasolina.

Respecto a los consumos, un aspecto importante a la hora de analizar a dos modelos híbridos, ya hemos comentado que desde Nissan esperan poder dejar al Qashqai en 4,5 litros en el ciclo combinado. De conseguirlo, se quedaría justo dos décimas por debajo del Austral, que ha homologado 4,7 litros.
Quizá lo último que puede decantar la balanza entre ambos modelos es el precio. Para el Qashqai deberemos esperar por lo menos hasta después del verano para conocer definitivamente en donde se establecerá. Mientras tanto sabemos que el Austral con su acabado de acceso que se denomina Evolution parte de los 36.522 euros. El duelo está servido.