Al mismo tiempo que nuevas autopistas de peajes concluyen sus concesiones privadas en España y pasan a ser gratuitas, tal y como prometió el actual Gobierno del PSOE al inicio de su primera legislatura, el pago por uso de las autovías en España como método inevitable de conservación y mantenimiento sin comprometer tantos fondos públicos sigue sobrevolando en la sombra a la espera de, quién sabe, su tramitación quizá definitiva en los próximos meses y años.
Y es que esta tasa, que pretende gravar la circulación de los vehículos en las autopistas y autovías de la red estatal de carreteras, ya estuvo en primera línea política durante años, cuando el Gobierno envió un primer borrador a la Unión Europea donde, entre otras medidas, el pago por uso de carreteras se incluía en un programa de negociaciones de los fondos comunitarios. Finalmente, hace justo un año, el propio ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puentes, fue quien descartó inicialmente su aplicación.

La patronal de constructoras pide pagar por el uso de las carreteras en España
El proyecto final de Ley de Movilidad Sostenible no incluía “ninguna mención al esquema de pago por el uso de la carretera”, confirmando el ministro de Transportes además que “esta posibilidad ya se descartó el año pasado en negociaciones con la Comisión Europea y se eliminó cuando remitimos la norma al Parlamento. Como se remite ahora exactamente lo mismo, está fuera de la ley”. Aun así, Óscar Puentes dejó una puerta abierta de cara a su posible entrada en vigor en el futuro, asegurando por último que “la única manera de llevarla a cabo sería mediante otro mecanismo o por la introducción de enmiendas a esta norma durante el trámite parlamentario que ahora vuelve a empezar”.
Pues bien, eso finalmente no ocurrió, pero los globos sonda sobre su futura implantación no cesan, y da ya que sospechar. Y es que, en las últimas horas, la Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras (Seopan) ha instado al Gobierno a, no solo actualizar ya los precios de los actuales peajes, sino sobre todo a valorar definitivamente los pagos por usos de las carreteras en España, confirmando que presentará un plan formal para ejecutarlos.
Cada coche pagaría 2,8 céntimos de euro por kilómetro recorrido
A través de una rueda de prensa, el presidente de la patronal de constructoras, Julián Núñez, ha asegurado que presentará en dos meses una propuesta al Gobierno, avanzando que su objetivo es establecer en las carreteras estatales una tarifa de al menos 2,8 céntimos de euro por kilómetros para los coches y de 8,2 céntimos de euro para los camiones.

Desde Seopan han analizado la inversión pública de 4.657 millones de euros llevada a cabo en 10 autovías durante 19 años y han establecido esta propuesta en función al tráfico que se ha registrado en las carreteras. Con esas tarifas, la patronal de las constructoras asegura que el Estado se ahorraría importantes partidas de gastos que abonarían solo los propios conductores que hagan uso de estas infraestructuras, sin interferir en fondos públicos generales.
España, el país con menos peajes de Europa
El presidente de Seopan ha querido destacar también en su intervención que los peajes propuestos son hasta un 78,5 por ciento inferiores a las tarifas medias que actualmente están activas en las propias autopistas de peaje, ya que “no hay que repercutir a los usuarios la inversión inicial en construcción”.
Desde la patronal de las constructoras han querido concluir la rueda de prensa informando sobre un estudio de la consultora PwC, encargado por la patronal europea de concesionarias de autopista, en la que se concluye que nada menos que el 73,8% de la red de autovías europea se opera y financia con peajes, frente a solo un 13 por ciento en España. De hecho, nuestro país es el que cuenta en el continente con menos peajes, a excepción de Finlandia y Chipre, donde directamente no existe ninguna carretera de pago.