Al final, por más que queramos, la teoría del afán recaudatorio que siempre persigue a la DGT cobra cada año más sentido. Entre acusaciones de buscar más los ingresos que la concienciación y el freno de siniestralidad, el plan controles de velocidad del máximo organismo de Tráfico en nuestro país sigue adelante y, lejos de ralentizarse, parece multiplicarse semana a semana.
A saber. En los últimos días hemos asistido al anuncio de nuevos radares con ruedas, un tipo de cinemómetro que la DGT confirma que instalará en los próximos meses para controlar, fundamentalmente, tramos de carreteras en obras. Móviles, pueden desplazarse entre ubicaciones y multan automáticamente, sin la necesidad de contar con la presencia de agentes. Junto a ellos, también hemos conocido que Tráfico apuesta por nuevos controles de distancia de seguridad, anunciando incluso hasta una nueva señal que se colocará en las carreteras para alertar de este nuevo método de control.

La DGT bate récord de recaudación con radares de velocidad
Drones, cámaras de uso de teléfono móvil o cinturón de seguridad, radares ya con tecnología de Inteligencia Artificial, nuevos controles de tramo más largos y avanzados… Cualquier nueva herramienta es buena para vigilar las infracciones. Y, de momento, parece dar resultado. Según el último informe de Automovilistas Europeos Asociados de 2024, la DGT batió récord de recaudación por sanciones, alcanzando prácticamente los 540 millones de euros de ingresos.
La mayor parte de esta recaudación, según el análisis preliminar, proviene de las denuncias por exceso de velocidad, que se contabilizaron en más de 3,4 millones de multas. AEA justifica esta cifra en el empleo de radares camuflados de la DGT, así como en el elevado número de fijos y móviles convencionales, que ya superan las 1.325 localizaciones en toda España. Y van a seguir aumentando.
A inicios de este año, la DGT confirmó que instalaría hasta 122 nuevos radares en España a lo largo de 2025 y el plan va viento en popa. De hecho, durante el pasado mes de agosto pudimos confirmar ya hasta 32 nuevos radares instalados, y el otoño va camino de seguir con esta misma tendencia. Eso sí, como avanzábamos al inicio, con técnicas de ubicación que son, cada día, más cuestionables.

Un nuevo radar indigna a los conductores: fotos exclusivas
El último radar que hemos constatado así lo indica. Como puedes ver en nuestras fotos exclusivas, se ubica en la carretera M-601, a la salida de Collado Villalba, una población situada a 40 kilómetros de Madrid, perteneciente a su misma comunidad y que cuenta con algo más de 65.000 habitantes. Allí, un nuevo cinemómetro instalado en los últimos días ha dejado perplejos a todos los conductores que habitualmente circulan por esta vía, de gran volumen de tráfico al suponer la vía de acceso y salida hacia la autopista A-6 desde numerosas poblaciones de la Sierra de Madrid.
Y es que, ubicado en mitad de una recta de algo más de un kilómetro de longitud, la sorpresa ha llegado cuando, a raíz de su ubicación, el límite máximo de la vía ha descendido en nada menos que 20 km/h. Como puedes ver en la imagen sobre estas líneas, donde hasta ahora había una señal con el límite máximo de 90 km/h, ahora, justo al instalarse el radar, aparece esta señal retirada (solo queda el soporte al suelo) y, en su lugar, poco antes se ha estrenado una nueva advertencia sobre la inmediatez del radar, con el límite máximo rebajado ya a 70 km/h. Sorprendente.

Durante días, además, los conductores han estado pasando por esta carretera sin ni siquiera conocer cuál era su límite máximo, ya que los navegadores indicaban los 90 km/h máximos tradicionales de la vía, pero los operarios de la DGT habían retirado toda señalización a la espera de instalar los nuevos carteles. ¿Alguien entiende esta estrategia si no es por recaudación? Que conste que esta vía no alcanza altos índices de siniestralidad, como sí padece a solo 2 kilómetros la carretera M-608 que conecta la misma localidad de Collado Villalba con Moralzarzal. En esta, con preocupantes cifras de mortalidad, por supuesto no se ha instalado ningún radar de momento. Había uno hace años y se retiró. ¿No generaba los ingresos esperados?