Las emisiones contaminantes se han convertido en el verdadero ogro de los automóviles. Lo son para usuarios y fabricantes, que hoy están ya obligados a adaptar oferta y demanda en base a nuevas normativas y a restricciones de uso que van a ir a más. Pero también lo son ya, sin duda, para los conductores que deben pasar la ITV, convertidas a día de hoy en la principal causa de rechazo en las inspecciones obligatorias.
A pesar de que las ITV comprueban hasta 10 capítulos distintos de cada vehículo, más de la mitad de los coches (hasta un 51,16 por ciento) tiene en el exceso de emisiones contaminantes la causa de suspenso y rechazo de las inspecciones, según constata el último Archivo de Vehículos de la Comunidad de Madrid que tuvo que acudir a una estación de ITV. Por detrás, quedan hoy problemas y defectos detectados en alumbrado, señalización o ejes, ruedas y neumáticos.
Pero, ¿cómo son las nuevas pruebas de emisiones a los coches que tantos defectos están constatando en las ITV? Actualmente, con la normativa de emisiones vigente Euro 6D en toda la UE, que entró en vigor en 2019 aunque ha sido ya actualizada en dos ocasiones para implementar nuevos software obligatorios en las centralitas de los vehículos para medir el consumo de los coches, el Manual de Inspección de las ITV adapta las pruebas y comprobaciones en función a esta norma y a cada tipo de vehículo y antigüedad.
Así son las nuevas pruebas de emisiones a los coches en la ITV
Con todo ello, y según nos cuentan desde la compañía especialista TÜV SÜD, en la actualidad existen distintos niveles máximos de emisiones que se miden en las nuevas pruebas de las ITV, dependiendo de la fecha de matriculación de los vehículos. Quedarían así:
- Pruebas para motores de gasolina: Los matriculados antes de 1986 tienen un límite de CO emitido a la atmósfera del 5%, mientras que para vehículos matriculados desde 2002, que ya cuentan con sistema avanzado de control de emisiones, el valor baja 0,3%.
- Pruebas para motores diésel: En este caso, se controlan las emisiones para vehículos matriculados desde 1980, siendo su valor máximo de opacidad de 3,0 m¯¹ para motores sobrealimentados. Este valor baja hasta 0,7 m¯¹ para los actuales motores Euro VI.
- Pruebas para motores desde nivel Euro 5/V: Adicionalmente a las pruebas anteriores, se realiza también una comprobación electrónica de los errores que pueda presentar el motor y que pueden no ser indicados en el cuadro de mando.
Aviso: las pruebas de emisiones se van a endurecer más
Estas pruebas, eso sí, son solo el principio de lo que está por llegar. Y es que a partir de 2035 entrará en vigor la nueva normativa que prohibirá la venta de vehículos de combustión, tal y como han acordado ya los estados miembros de la Unión Europea. Los fabricantes por tanto tendrán que adaptarse paulatinamente ya a las nuevas normas de emisiones, como la Euro 7 que aún no se ha aprobado en la Comisión Europea pero que regulará las emisiones contaminantes de forma todavía más estricta en los próximos años.
En este sentido, el director técnico de la División de ITV de TÜV SÜD España, Juan Portillo, avisa de que ya “se están estudiando nuevos métodos para medir la exposición a partículas (PM) o las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx). De hecho, Bélgica, Alemania y Países Bajos ya disponen de equipos y han comenzado a utilizarlo en las inspecciones técnicas periódicas”. Lo peor está, por tanto, por venir.