En el mes de abril se registró un fatídico incendio en la localidad alicantina de Calpe que alertó a los vecinos de esta conocida población turística. El causante de este altercado fue un coche eléctrico, que en ese momento estaba cargando su batería, y como suele pasar con estas noticias, las reacciones no se han hecho esperar.
Da igual que hayan aparecido muchos estudios en los últimos tiempos en los que se señala que los coches eléctricos o electrificados se incendian con menos frecuencia. Basta con que uno lo que haga para que la ola en contra de estos vehículos para que sus opositores vuelvan a inundar las redes con sus comentarios. Todo ello sin obviar, que cuando arden se convierten en un gran problema porque es mucho más difícil sofocar sus llamas.
El Ayuntamiento que ya no quiere coches eléctricos
En los últimos años, los Ayuntamientos españoles, algunos a más ritmo que otros, están cambiando paulatinamente sus flotas por coches electrificados. No hay que olvidar que desde la Unión Europea se está subvencionando esta sustitución, lo que significa que, si no optan por este tipo de vehículos, perderían los fondos procedentes del Next Generation.
Esto último quizás no ha llegado todavía a los oídos de la alcaldesa de la citada localidad costera, Ana Sala (Somos Calpe), que ha anunciado en el pleno del ayuntamiento que no va a renovar el contrato de renting que vence en noviembre para seguir contando con coches eléctricos en la flota del consistorio.
La medida viene provocada desde el miedo y es probable que también desde el desconocimiento. El coche que ardió en Calpe no era precisamente nuevo y quizás una falta de mantenimiento fue el causante de las llamas, una posible suposición del que escribe. Sin olvidar tampoco al punto de carga, que en algunos de estos siniestros también fueron los culpables. Sea como fuere, y aún reconociendo que “ha sido algo puntual”, la alcaldesa ya no quiere coches eléctricos.
Lo más llamativo del anuncio, según recogieron los compañeros de la Cadena Ser, fue la frase que utilizó para anunciarlo: “Si tienen que ser de gasolina, gasoil o lo que tenga que ser, o hidrógeno verde, ese que está de moda… no lo sé, ni lo conozco, ni lo entiendo. Eso se lo dejo a los expertos”. Nos queda claro que su conocimiento en este aspecto es bajo, por el hecho de meter en esta ecuación a los coches de hidrógeno, que no tienen puntos donde recargar, son escasos en su oferta y comparten muchos elementos con los eléctricos de los que ahora reniega.
En Madrid también se toman medidas y los bomberos piden protección
Otro hecho que se achaca a cualquier incendio de un coche eléctrico es que se vuelve viral en pocos minutos. Y aunque se quemen 500 de otros combustibles, nunca los podrán hacer sombra en visitas en ningún medio. Por ejemplo, algunos tachan que el comienzo del 2025 ha sido “negro” en la Comunidad de Madrid.
Fue en el pasado mes de febrero cuando en pocas horas se registró un incendio de un coche eléctrico en el parking San Cayetano y otros dos ardieron en otro aparcamiento situado en la calle Marqués de Urquijo. En ambos casos no afectaron a otros vehículos ni hubo que lamentar heridos durante su extinción.
A estos percances se sumó el acontecido en Alcorcón, en el que fallecieron tres bomberos durante las labores de extinción. En este, aunque muchos medios apuntaron a que había sido provocado por un coche eléctrico, las investigaciones aclararon posteriormente que el origen había sido uno de combustión al chocar con un híbrido enchufable. Al entrar en acción este último fue cuando el incendio se desató.
Por estos acontecimientos, en algunos aparcamientos privados de la capital han tomado la decisión de prohibir la entrada a los vehículos eléctricos utilizando el derecho de admisión para minimizar los riesgos. Ha sido una decisión polémica, pero los dueños de estos lugares indican que apagar las baterías de estos coches es muy costoso y las pérdidas pueden ser enormes en caso de un incidente.
A esto tenemos que sumar que diferentes cuerpos de bomberos están pidiendo desde hace tiempo un esfuerzo a la administración para poder actualizar los protocolos de actuación en los incendios en los que se vean involucrados coches electrificados. Una de las medidas que piden es comprar material adecuado, como podría ser el invento Ecofire Fighting de Simonrack, del que te hablamos hace unos días.
Como último dato, para hacer ver al lector que no todos los incendios de coches son provocados los eléctricos, en el día de ayer tenemos un ejemplo en el Barrio Antiguo de Donostia. Según informan desde el Diario Vasco, una furgoneta de combustión empezó a arder y sus llamas terminaron de alcanzar a otro vehículo al que calcinaron parcialmente. Pero seguramente esta noticia no se haga viral.
