Este mismo sábado se celebró el acto institucional del inicio de la producción del primer Ebro en sus instalaciones de Barcelona. De esta manera, lo que antes conocíamos como Zona Francia y ahora se ha bautizado como Ebro Factory, ha comenzado a ensamblar las primeras unidades del S700, el primer SUV que lanzará al mercado la renacida marca española.
Al acto inaugural no han faltado las principales personalidades políticas como son el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, el presidente de la Generalitat de Catalunya, Salvador Illa, el presidente del Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional China, Zhao Leji; el embajador de China en España, Yao Jing; el delegado del Gobierno en Catalunya, Carlos Prieto, y el teniente alcalde de Economía de Barcelona, Jordi Valls. El primero quiso señalar que esta alianza entre Ebro y Chery es un ejemplo “para muchos otros proyectos” entre empresas españolas y chinas.

Y tampoco faltaron los principales protagonistas del evento como son el presidente de EV Motors-Ebro, Rafael Ruiz; el presidente de Ebro, Pedro Calef; el presidente de Chery, Tongyue Yin, y el presidente de Chery International, Guibin Zhang, entre otros. Fue precisamente el máximo mandatario de la firma asiática el que prometió “hacer todo lo posible” para mejorar el entorno económico de la planta y así devolver los beneficios que se generen a la sociedad catalana.
Así comienza la Ebro Factory
El 16 de diciembre de 2021, salió de la Zona Franca el último Nissan, tras 41 años de operaciones de la marca japonesa en dicha factoría. Entonces perdieron su trabajo unos 2.500 trabajadores, de los cuales Ebro ha prometido generar hasta 1.250 para sus proyectos. Y dentro de ellos está el S700, protagonista en las fotografías que acompañan este artículo, así como el S800, otro SUV del que esperan empiece a montarse en las próximas semanas. Tanto uno como otro se comercializarán con una mecánica de gasolina y otra híbrida enchufable.

En estos primeros meses los trabajadores de Ebro solo ensamblarán los modelos en Barcelona, mientras que a partir del 2025 se irán incrementando sus funcionalidades empezando con las soldaduras, la pintura o el montaje completo de cada uno de los vehículos que salgan de la planta catalana.
La hora de ruta marcada por los responsables de Ebro pasa por vender en torno a 1.400 unidades en lo que queda de año, siendo la rampa de salida para que en 2025 se puedan alcanzar las 30.000 unidades. Si todos los objetivos se cumplen, ya para el 2029 se deberían superar las 130.000 unidades con toda la gama de modelos que tengan entonces.

Los planes para el 2025
Con estos ambiciosos objetivos, Ebro se lanzará a vender sus dos primeros SUV tanto en el mercado español como en el andorrano. Para eso su idea es la creación de 30 concesionarios y un servicio posventa centralizado en España, que pueda dar la correcta demanda a todo el territorio.
También hemos conocido que a principios del próximo año se espera la llegada a la Ebro Factory del S400, su tercer modelo, mientras que a final de año se espera la llegada de un cuarto integrante más pequeño que el anterior. Y mientras tanto también comenzarán las operaciones de Omoda en la fábrica, de donde se ha confirmado que saldrá el 5.

Pero los planes entre Ebro y Chery no se quedan sólo ahí. Teniendo en cuenta que la distribución del “hub” que controla las instalaciones de producción ha quedado en un 60% para los españoles y un 40% para los chinos, ambas marcas están estudiando la posibilidad de crear un centro de I+D en Barcelona de estilo similar al que tienen los asiáticos en Frankfurt (Alemania).