No se puede decir que no hay variedad en la gama de la quinta generación del Kia Sportage. A las versiones de gasolina, -con y sin hibridación ligera de 48 voltios-, y al híbrido convencional, BEV, que comenzaron a venderse a comienzos de año, se unen ahora las nuevas versiones diésel, -también con y sin hibridación ligera-, y el Plug-in Hybrid híbrido enchufable, propulsión que por primera vez se ofrece en este modelo y que conducimos. No contará con versión cien por cien eléctrica, ya que los nuevos eléctricos de la marca se derivarán de la plataforma EGMP específica para esta propulsión de la que vienen el EV6 y el EV9 y los futuros EV1, EV2… Recordemos que el Sportage, al igual que el Hyundai Tucson se derivan de la plataforma N3 del Grupo Hyundai.
Y la versión PHEV de este Kia portage no defrauda ni en fondo ni en forma. Combina un eficiente motor T-GDI de 1.6 litros con un motor eléctrico de imanes permanentes de 66,9 kW, ambos ofrecen conjuntamente una potencia de 265 CV. La batería, de iones de litio y polímero de 13,8 kWh de capacidad, se ubica entre ejes, para maximizar el espacio de los ocupantes. Sorprende su autonomía –si bien es cierto que cuenta con una batería ligeramente más grande que otros PHEV-, homologa 70 kilómetros en WLTP en modo cien por cien eléctrico y 78 kilómetros en ciudad, a bajas velocidades donde se estira mucho más como hemos podido comprobar. La caja de cambios de seis velocidades es automática, con un funcionamiento muy suave y cómodo.

Kia Sportage PHEV 2022: modo híbrido o eléctrico
Puedes elegir ir en modo completamente eléctrico o híbrido. Muy agradable de conducir en cualquiera de los dos, nos ha sorprendido muy gratamente el bajo consumo obtenido cuando las baterías se han agotado, principal hándicap de los híbridos enchufables ya que suele disparar el consumo de éstos. En el caso del Sportage PHEV, su consumo nos ha marcado 6 litros, es cierto que íbamos por carreteras a unos 90 km/h pero la cifra es muy favorable si tenemos en cuenta las cifras de su competencia. La clave está en cómo va recuperando energía para la batería optimizando mucho el consumo final. Dos sistemas ponen su granito de arena en su eficiencia, el módulo híbrido alternador-motor de arranque (Hybrid Starter Generator HSG) y la unidad de control para la potencia híbrida (Hybrid Power Control Unit HPCU).
El sistema de carga instalado (OBC), el cargador embarcado, de este Kia Sportage PHEV permite una capacidad de 7,2 kW, algo que reduce el tiempo de recarga de forma importante.

Cuenta con el nuevo modo Terrain, que aumenta sus capacidades camperas y que ajusta automáticamente la configuración del Sportage para una dinámica de marcha óptima en cualquier condición del terreno. Aparte del modo Terrain, dos modos de conducción, Eco, que se pone por defecto y Sport que estira un poco más el cambio y trabaja sobre la suspensión. En todo caso, la suspensión, delantera de tipo MacPherson y detrás con configuración de cuatro brazos, es quizá lo que menos nos convence, nos ha resultado ligeramente blanda.
Kia Sportage PHEV 2022: sus precios
Como comentamos en la primera toma de contacto del modelo, esta nueva generación del Kia Sportage crece 3 centímetros en total, mide 4,51 m de largo ofreciendo un modelo más compacto pero interiormente más habitable. Como el resto de la gama presenta una calidad percibida superior, con un ambiente mucho más tecnológico, y equipamiento de segmentos superiores. Comparte con el EV6, por ejemplo, gran parte de los elementos de la botonería, con las dos pantallas de 12,3 pulgadas, una central y otra como cuadro de instrumentos y la tira digital que se ubica bajo la primera. Nos gusta la carga inalámbrica y los dos puertos USB, uno de cada tipo, desde el que poder conectar el Smartphone.

Uno de los grandes alicientes del nuevo Sportage es su precio. El Kia Sportage 1.6 T-GCi PHEV parte de los 33.750 euros, con las ayudas del Moves III incluidas, que se corresponde con la versión más básica, Drive, mientras que la Tech se queda en 37.365 Y la más alta de gama, la GT Line, 43.165 euros.