Se avecinan grandes cambios dentro de Bentley. La firma británica de lujo perteneciente al Grupo Volkswagen ya nos ha ido avanzando en los últimos días una renovación de su logo, la actualización de sus instalaciones de diseño en Crewe (Inglaterra) y faltaba el toque final: un prototipo que anticipe sus futuros diseños.
Y no sé si se habrá hecho a propósito, pero este sedán deportivo de lujo que representa el EXP 15 ha chocado tanto como en su día lo hizo el prototipo de Jaguar. Es como si el aire de las islas británicas hubiera envuelto a sus diseñadores en una vorágine creativa para crear este coche que se puede decir que es mitad coupé, mitad sedán y otro poco más de crossover. Quizás un poco al estilo del DS Nº8, salvando las distancias.

Analizándole más detenidamente, este EXP 15 muestra un frontal dominado por una gran parrilla cerrada, que ya nos da una pista del tipo de motorización que utilizará. En ella se ha incluido iluminación para crear el efecto de una tradicional. La flanquean a los lados los faros verticales y el nuevo emblema alado, también con luz, que Bentley acaba de presentar recientemente.
De su lateral podemos extraer varios detalles, aunque su mayor rareza puede ser la configuración de sus puertas. El prototipo está concebido para contar con una en el lado del conductor (aquí sería el derecho por presentarse con volante en ese lado) y otras dos en el contrario para los pasajeros. A esto sumamos unas grandes ruedas, una trabajada aerodinámica y una considerable altura libre al suelo.

Y de todo el conjunto quizás la parte trasera sea la menos llamativa de todas. Si obviamos el alerón partido en dos en la zona más alta o el mercado difusor, creo que no es tan impactante como la zona delantera. Las luces ciertamente recuerdan a Volvo/Polestar, mientras que no se termina de apreciar correctamente qué tipo de apertura tendría el maletero (más adelante te lo cuento). Todo ello con una carrocería que esperamos supere los 5 metros.
El interior no se queda atrás
Si no te había impactado suficiente el exterior de este EXP 15, acompáñame al interior. Aquí se ha configurado con tres asientos (1+2) con un espacio extra de almacenamiento en cabina que se podría utilizar, como vemos en las fotografías, para colocar un transportín de un animal. Pero hay más, uno de las butacas traseras se puede reclinar en un modo “relax”, se adelanta hasta la altura del conductor o se gira 45 grados para facilitar la maniobra de entrada y salida del propio coche.

Dejando de lado las peculiaridades de los asientos, en el salpicadero encontraremos un tablero “Wing Gesture” que puede contar con una pantalla que completa todo el ancho. El panel de instrumentación es más bien delgado, mientras que la multimedia central es mucho más grande y en formato vertical. Y se completa con otro display al lado contrario del volante, quizás algo innecesario si finalmente no viaja nadie en ese lugar. Todas ellas se podrían llegar a apagar para revelar una superficie de madera chapada.
Y el maletero está preparado para utilizarse como una zona de picnic de lujo. Parte del portón trasero se pliega para descubrir dos pequeños asientos con un mullido aparentemente cómodo. A esto sumamos una luz trasera que se puede desplazar por una guía como si fuera un candelabro, así como una nevera portátil creada para la ocasión.

Podría ser el primer Bentley eléctrico
Analizado por completo este EXP 15, su versión definitiva de producción debería llegar al mercado el próximo año. Lo normal es que cuente con un sistema de propulsión totalmente eléctrico con tracción total, una gran autonomía y velocidades de recarga acordes a lo que esperan sus acaudalados clientes. Y es posible que tenga muchos elementos en común con el próximo Porsche Cayenne.