Si creíamos haberlo visto todo en España con los mini radares Veloláser, los nuevos radares de tramo de hasta 30 kilómetros o los drones que ya sobrevuelan las carreteras, mira al cielo, porque en Cataluña ya vigila el radar más potente que se haya visto nunca en nuestro país. Es un helicóptero, pero su nombre es Falcó y estrena tecnología que deja hoy al Pegasus de la DGT a un nivel muy inferior.
Anunciado ya a inicios del verano por el Servei Catalá de Tránsit (el SCT, que es quien tiene las competencias de tráfico en Cataluña), y asegurando que se ponía entonces a prueba un radar en funcionamiento “nuevo y que no se había usado antes en ningún sitio”, el helicóptero Falcó ya ha pasado todas las validaciones y ha empezado a multar, tras meses constatando su eficacia y fiabilidad. Y es para temblar.
Porque si del Pegasus de la DGT ya se temía su capacidad para sobrevolar a distancias de hasta 2.500 metros de altura, aunque suele funcionar a un máximo de 700 metros, equipando telémetro láser, cámaras de alta velocidad, excesos de velocidad de hasta 360 km/h y pudiendo realizar hasta tres mediciones de velocidad a 3, 6 y 9 segundos para calcular la media, el Falcó de la SCT anuncia especificaciones muy superiores. Nueva guerra entre Madrid y Barcelona.
El nuevo radar Falcó usa tecnología óptica única y propia
Según el SCT, su nuevo radar usa una tecnología única y totalmente propia, “indetectable para cualquier sistema existente de inhibidores o detectores”, según ha confirmado el propio director de Tránist, Ramón Lamiel. Considerado ya técnicamente una primicia, el sistema homologado y patentado en Cataluña se convierte en el “único radar aerotransportado del mercado que no emite ningún tipo de onda, efecto Doppler o rayo láser”.
🚁📽 L'#SCT posa en marxa el sistema Falcó, un radar aerotransportat indetectable, per controlar des de l'aire i en moviment els excessos de velocitat a les carreteres#SeguretatViària pic.twitter.com/YvT520CLNB
— Trànsit (@transit) July 18, 2024
Se trata, por tanto, de un nuevo radar que emplea tecnología óptica muy sofisticada, basada en antenas satelitales, con capacidad para geoposicionar los vehículos y calcula su velocidad “con menos de un 2% de margen de error”. Su información técnica asegura que monta una cámara MX15, fabricada por la compañía L3 Wescam, y capaz de superar obstáculos con los que cuenta el Pegasus, solo apto para multar con ángulos verticales que no superen los 30 grados de inclinación y con márgenes de maniobra de entre 20 y 70 grados de inclinación lateral.
Este helicóptero multa incluso de noche y con lluvia y necesita 3 segundos para tomar 2 fotos
El nuevo Facló del SCT, a cambio, anuncia que solo necesita también 3 segundos para calcular la velocidad a la que viajan los coches y tomar dos fotografías con las que denunciar la infracción, siendo incluso, a diferencia del Pegasus de la DGT, de funcionar con garantías en situaciones de baja visibilidad y con malas condiciones meteorológicas.

Esta condición se traduce en que el Falcó del SCT es capaz de multar tanto de noche como con lluvia, siendo únicamente la seguridad de vuelo del helicóptero la que marque el uso que las autoridades quieran darle para controlar la velocidad en las carreteras catalanas. El Falcó, de momento, se está usando en la comunidad con un piloto a bordo, al que acompaña un operador de cámara que es, en la práctica, quien localiza y apunta al vehículo al que se quiere controlar.
Este sistema es capaz también de hacer un seguimiento automático del coche a vigilar, certificando las velocidades a las que circula. Y no te confíes con solo cumplir los límites de velocidad, porque esta nueva herramienta del SCT también es capaz ya de controlar y sancionar distracciones, como el uso del teléfono móvil o la ausencia de cinturón de seguridad.