Europa se ha plantado y ha decidido actuar. Con el agravante de haber contabilizado la llegada masiva de automóviles eléctricos de batería procedentes de China en un período muy corto, en concreto más de 200.000 vehículos nuevos entre octubre y enero, la Comisión Europea anunciaba ayer lo que ya era un secreto a voces: que comenzaba a registrar todas las importaciones de estos productos procedentes de China, con el objetivo de investigar finalmente si incumplen con las normas antisubvenciones obligatorias de la Unión Europea.
Ya hay pruebas de competencia desleal: los coches chinos son un 20% más baratos por subvenciones
Bruselas, asimismo, confirmaba tras este anuncio que incluso se planteaba ya abiertamente, en caso de confirmar estas sospechas, poder imponer a todos estos coches eléctricos chinos aranceles retroactivos. Y es que, según sus estudios, la llegada de estos vehículos aumenta un 11 por ciento cada mes y son hasta un 20% más baratos, ofreciendo precios con los que los fabricantes europeos no pueden competir.
Pues bien, horas después, la eurodiputada de Ciudadanos y portavoz de Industria en el Parlamento Europeo, Susana Solís, ha aplaudido la decisión de iniciar estos registros aduaneros, asegurando además que “la Comisión Europea tiene ya pruebas de la competencia desleal china. Espero más medidas y mucha firmeza. A nuestra industria le gusta competir, pero en igualdad de condiciones”.

Las investigaciones comunitarias empezaron en octubre
La experta en el sector del automóvil, que ha participado además activamente en todas las negociaciones sobre la nueva norma Euro 7 y sobre la prohibición de venta de los coches con motor de combustión, confirma que la Comisión Europea ha encontrado ya por tanto pruebas de competencia desleal dentro de la investigación antidumping que abrió el pasado mes de octubre.
“Esta investigación antidumping es trascendental para la competitividad del mercado europeo y me alegro de que empiece a dar resultados. A nuestra industria le gusta competir, pero en una igualdad de condiciones que no se están dando. Gracias a los subsidios, China se ha convertido en el mayor productor de vehículos eléctricos, controla los materiales críticos y también las baterías”, ha denunciado la eurodiputada, que ha presentado una pregunta escrita a la Comisión Europea sobre este asunto.
Bruselas también ha confirmado igualmente en las últimas horas, tras anunciar el inicio de estos registros aduaneros, que dispone ya de suficientes pruebas que sugieren “que las importaciones de vehículos eléctricos de China están siendo subsidiadas”. De momento, los registros han sido solo la primera medida aplicada por la UE, dentro de un proceso de investigación muy completo y amplio, encaminado a proteger a la industria europea ante prácticas prohibidas en nuestro continente y ante las que no pueden competir.

Los aranceles podrían llegar en julio
Susana Solís ha confirmado además que, inicialmente, la nueva medida de registrar todas las importaciones que lleguen de vehículos eléctricos chinos pretende “disuadir a los fabricantes chinos de registrar la mayor cantidad de automóviles posible en Europa antes de que se publique la conclusión sobre los aranceles, prevista para julio”.
La eurodiputada también se ha mostrado crítica con la respuesta de China, que “ha manifestado su descontento, pero con bastante cinismo ha añadido que dada la creciente demanda de vehículos eléctricos en Europa, las compañías automotrices chinas han demostrado su compromiso con impulsar nuestro mercado”. Susana Solís ha anunciado que dirigirá próximamente una carta a la Comisión Europea "para reclamar más información al respecto de las medidas cautelares que se tomarán al respecto para que el sector del automóvil pueda competir de manera justa dentro y fuera de la UE”.