Vinculada a los fondos europeos para la recuperación, el Congreso de los Diputados ya aprobó el pasado año la nueva Ley del Cambio Climático y Transición Energética, una normativa que pretende inducir ya una transformación social y económica para lograr la neutralidad climática en el año 2050. Se trata de un camino necesario ya hacia la total eliminación de las emisiones de efecto invernadero, producidas fundamentalmente por los combustibles fósiles.
Como noticias más destacadas ya conocerás, probablemente, que entre los objetivos acordados figuran, por ejemplo, reducir para 2030 en al menos un 23% las emisiones de gases de efecto invernadero respecto a 1990 o tener un consumo final de energías renovables de al menos el 42% al final de la década. Pero sobre todo sabrás que, en 2040, todos los vehículos que se vendan deberán ser ya de energías limpias, con la prohibición de comercializar modelos de gasolina, diésel o híbridos.

Y, por supuesto, también habrás oído hablar, o habrás visto ya, que existe en este 2023 la obligación de instaurar en muchas ciudades de España las llamadas Zonas de Bajas Emisiones. Estas ZBE de la DGT son obligatorias en todas las ciudades de más de 50.000 habitantes, además de en territorios insulares y en las poblaciones de más de 20.000 habitantes con incumplimientos en materia de calidad del aire.
Obligación de instalar más puntos de recarga para coches eléctricos
Hasta aquí, todo muy conocido. Sin embargo, hay alguna otra norma que incluye ya la nueva Ley del Cambio Climático y Transición Energética que ha pasado más desapercibida y que también será obligatoria a partir de este mismo 2023. Hablamos, en esta ocasión, de una normativa que ya implica a estaciones de servicio y edificios de uso no residencial.
Y es que esta nueva ley obliga ya, en este 2023, a que todas las estaciones de servicio instalen más puntos de recarga para coches eléctricos y a que todos los edificios que no sean de uso residencial, y con más de 20 plazas de aparcamiento, tengan que contar obligatoriamente con estos mismos puntos de recarga.

También cabe recordar que esta nueva ley prohíbe, además, las exploraciones y proyectos de extracción de hidrocarburos en España y tampoco permite prorrogar los actuales proyectos de extracción más allá del 31 de diciembre de 2042. También se prohíbe, específicamente, la técnica de la fractura hidráulica (fracking) y también la minería radiactiva (uranio).