Antes de que empieces a frotarte las manos pensando que una marca de coches te va a cambiar tu vieja joya por uno nuevo, tengo que contarte que existen una serie de condiciones que seguramente no cumpla. Pero más allá de esto, noticias que hemos podido encontrar en los últimos meses certifican que no se trata de un mito y con las redes sociales han podido dar la vuelta al mundo.
Como bien apuntan desde El Debate, las marcas japonesas son las más habituales en buscar este tipo de coches únicos. La razón es que suelen hacer de la fiabilidad uno de sus caballos de batalla y estos modelos en concreto son los mejores exponentes que pueden ofrecer a aquellos clientes que todavía no confían en ellas.
Seguramente ahora ya te habrás dado cuenta de la característica que deben cumplir estos coches para que a las marcas les salte su particular radar: un kilometraje con hasta siete cifras. Una vez en su posesión lo que se suele hacer con ellos es exponerlos en los correspondientes museos con los que cuentan algunas marcas y también se los dejan a los ingenieros para que puedan analizar porque ese modelo en cuestión ha logrado estirar su vida útil durante tanto tiempo.
Desde la misma publicación comentan que se han dado dos historias relativamente recientes que demuestran que el cambio de un coche antiguo muy rodado por uno nuevo no es un bulo y le ocurren a gente convencional. Y una de las claves que han coincidido en ambos casos es que sus propietarios han pasado las revisiones en los concesionarios oficiales, con lo que la marca en cuestión ha podido estar al tanto del kilometraje.
Para el primero de ellos nos tenemos que ir hasta Grecia. Allí un taxista que trabaja en la ciudad de Salónica ha sido capaz de conducir su Mercedes 220D de 1976 (de la serie W115) durante casi 50 años y en ese tiempo ha acumulado casi 4,6 millones de kilómetros, una cifra muy impresionante. Dicho hito llegó hasta los oídos de la marca alemana, que le ofreció cambiárselo totalmente gratis por un Mercedes Clase C nuevo, a lo que el propietario accedió para trasladar posteriormente su vehículo hasta el museo de la firma teutona situado en Stuttgart.
Algo parecido le ocurrió también al norteamericano Victor Sheppard, el cual ostentaba un Toyota Tundra con nada menos que 1,6 millones de kilómetros. Pues bien, se ha conocido que el fabricante japonés ya le ha obsequiado con el mismo modelo, pero con las especificaciones actuales. ¿Será capaz de alcanzar de nuevo el mismo kilometraje?
Como último dato curioso, desde El Debate también señalan que hace poco Irv Gordon, al que Volvo le hizo famoso por haber alcanzado los 5 millones de kilómetros con un P1800, se subió un poco a la parra pidiendo a la marca nada menos que 3 millones de dólares por su coche. Los escandinavos, como era de esperar, le dijeron que no.