La tecnología MHEV (Mild Hybrid Electric Vehicle) o híbrido suave está ganando protagonismo en el mercado. Representa un punto intermedio entre los motores tradicionales de combustión y los coches eléctricos que requieren enchufarse. Permite reducir consumo y emisiones sin cambiar los hábitos de conducción, lo que lo convierte en una opción atractiva para quienes quieren dar un paso hacia la movilidad sostenible sin complicaciones.
¿Qué es un coche MHEV y cómo funciona?
Un MHEV es básicamente un coche de combustión al que se le añade un pequeño sistema eléctrico. Este incluye un motor eléctrico auxiliar y una batería de 48V que se recarga de forma automática gracias al frenado regenerativo.
El motor eléctrico no sustituye al de combustión, sino que lo apoya en momentos clave, como el arranque o las aceleraciones, reduciendo así el esfuerzo del propulsor principal. Esto mejora la eficiencia y disminuye el gasto de combustible.

Cómo se recarga la batería en un MHEV
En los coches MHEV no es necesario enchufar el vehículo. La energía se recupera cuando el conductor frena o levanta el pie del acelerador, acumulándose en la batería para luego ser utilizada cuando haga falta. Además, en determinadas fases de la conducción, el motor eléctrico actúa como generador para mantener la batería cargada.
Ventajas de un coche MHEV
Los coches mild hybrid ofrecen varias ventajas para el día a día:
- Consumen menos gasolina, especialmente en entornos urbanos.
- Emiten menos CO₂, ayudando a cumplir con la normativa medioambiental.
- Llevan la pegatina ECO de la DGT, lo que permite circular en zonas de bajas emisiones y acceder a descuentos en impuestos.
- No necesitan infraestructura de carga, lo que los hace más prácticos que otros motores híbridos más complejos.
- Su mantenimiento es similar al de un coche convencional, sin gastos añadidos.

Diferencias entre MHEV, HEV y PHEV
Es habitual confundir los distintos tipos de híbridos, pero hay diferencias claras:
Tecnología |
Cómo funciona |
Recarga |
Autonomía eléctrica |
Ventajas principales |
---|---|---|---|---|
MHEV (Mild Hybrid) | Motor de combustión apoyado por un sistema eléctrico de 48V. | Se recarga con frenado regenerativo, sin enchufe. | No puede moverse solo en modo eléctrico. | Menor consumo, pegatina ECO, precio más bajo. |
HEV (Híbrido Eléctrico) | Combina motor de combustión y eléctrico con más potencia. | La batería se carga con el motor de gasolina. | Puede circular algunos km en eléctrico. | Más eficiente en ciudad, sin enchufes. |
PHEV (Híbrido Enchufable) | Motor de combustión + eléctrico de mayor capacidad. | Se enchufa a la red (doméstica o pública). | Más de 40 km en modo eléctrico. | Etiqueta CERO, ideal para trayectos urbanos. |
En resumen, los MHEV ofrecen eficiencia sin necesidad de puntos de recarga, mientras que los HEV y PHEV permiten mayor electrificación, con el PHEV como opción más cercana a un eléctrico puro.
Marcas que apuestan por la tecnología MHEV
Cada vez más fabricantes incluyen versiones MHEV en sus gamas. Audi lo ha hecho en modelos como el A6 y Q5, BMW en el Serie 3 y Serie 5 —muy buscado en el mercado de segunda mano por quienes valoran el equilibrio entre calidad y mantenimiento BMW—.
Ford, KIA, Suzuki y Volkswagen también han lanzado versiones mild hybrid, ofreciendo una alternativa más económica frente a los híbridos enchufables. Esta tendencia refleja la transición hacia la electrificación sin abandonar la practicidad.

¿Merece la pena comprar un MHEV?
Un MHEV es perfecto para conductores urbanos que quieren reducir consumo y emisiones sin preocuparse por enchufar el coche. También es recomendable para quienes buscan un mejor coche híbrido calidad precio, ya que suelen ser más baratos que los híbridos completos o enchufables, pero con muchos de sus beneficios.
Eso sí, conviene tener en cuenta que casi todos los coches híbridos son automáticos, lo que facilita la conducción, pero puede ser un cambio para quienes siempre han conducido con cambio manual.
En definitiva, los MHEV representan una transición lógica hacia la electrificación: más eficientes que un motor tradicional, con beneficios medioambientales y económicos, pero sin exigir un cambio radical en los hábitos del conductor.