Pese a que es una acción en la que prima nuestra seguridad, y la del resto de ocupantes de la carretera, pasar la Inspección Técnica de Vehículos es algo que se sigue atragantando a mucha gente. Tanto que, según los últimos datos, unos tres millones de coches podrían estar ahora mismo circulando por España sin haberla pasado, con el peligro que ello supone.
Otros parece que escogen otra solución que no es más que tirar de ingenio para tratar de pasar la ITV utilizando auténticas chapuzas como las siguientes que nos han proporcionado desde TÜV Rheinland y que han recopilado en sus instalaciones. Seguramente algunos pensarían que los trabajadores no se darían cuenta…
Una pegatina de la ITV casera
Cuando completamos la inspección de la ITV siempre se nos proporciona una pegatina que debemos colocar en la parte de arriba y a la derecha de nuestra luneta (mirando desde dentro). De no hacerlo así nos podríamos enfrentar a una multa de 100 euros o incluso del doble si llevamos tantas que nos impiden una buena visibilidad.

Pero este conductor decidió que lo mejor era “fabricarse” una pegatina casera y la verdad que no le falta detalle… números, escudo de la localidad, los meses, la pena es que el desempeño con la tijera no fue del todo satisfactorio. Pues esto que puede parece una broma se puede considerar como un delito de falsedad documental con multas comprendidas entre los 6.000 y los 12.000 euros, así como penas de cárcel de entre 3 y 6 meses.
La cinta adhesiva vale para todo
En muchas situaciones se utiliza la cinta adhesiva para agarrar elementos de la carrocería que se han caído antes de poder llevar el coche a un taller para arreglarlo. Pero como nos comentan en TÜV Rheinland, muchos utilizan este apaño temporal para intentar tapar desperfectos durante la inspección. Pues ya te adelantamos que no te servirá de nada, ya que como encuentren elementos cortantes te pueden llegar a multar.

El cinturón “inseguro”
Los cinturones se han convertido desde hace años en uno de los elementos que aportan más seguridad a todos los ocupantes del vehículo. Esta idea no la deben compartir nuestros protagonistas chapucillas, ya que según nos cuentan desde TÜV Rheinland muchos tiran de hilo y aguja para remendarlos, otros usan grapas que son más fuertes y otros tantos optan por un nudo. Es una pena porque con todas estas soluciones se corre el riesgo de que este elemento no cumpla su función correctamente.

Un espejo que tenía por casa…
Actualmente según la ley en un coche es obligatorio llevar un retrovisor en el lado izquierdo y otro en el interior. Solo en caso de que este último esté inhabilitado, como pasa en algunas furgonetas, se incluye dentro de la obligatoriedad el derecho. Pero más allá de este apunte, algunos conductores llegan a la ITV con un espejo que han encontrado por casa. Para empezar, no son iguales que los retrovisores pues estos son convexos para aumentar el ángulo de visión y la sanción por no llevar uno reglamentario es de 200 euros.

Cuidado con las emisiones
Un poco a lo que sucedió con el “Dieselgate”, muchos usuarios intentan trucar su sistema de escape o los filtros de partículas para que en la prueba de emisiones sus coches queden dentro de los límites permitidos. Una acción que es totalmente ilegal, que perjudica el medio ambiente y que lo único que provocará es que nos declaren la ITV como desfavorable o negativa.

No hay que olvidar que circular actualmente sin haber pasado la ITV conlleva una multa de 200 euros, que se puede rebajar a la mitad con pronto pago. Pero en caso de que la inspección haya sido negativa y se siga utilizando el vehículo, la sanción sube hasta los 500 euros y aquí no hay descuento posible.