La DGT continua con su estrategia de reordenar carriles y arcenes, fomentando al mismo tiempo una movilidad más sostenible e, incluso, alternativa. El año pasado, por ejemplo, ya conocimos que, a través de un nuevo Real Decreto, uno de los objetivos de tráfico era la modificación del Reglamento General de Circulación (RGC) para habilitar el uso de los arcenes por ciertos vehículos y en determinadas circunstancias.
En concreto, un cambio en el artículo 36 autorizará a que las motos puedan circular por los arcenes de la derecha en todo tipo de vías, “a una velocidad no superior a 30 km/h y respetando la prioridad de vehículos obligados a circular por el arcén, especialmente a las bicicletas”. Además, un nuevo artículo 36.4 también prevé “autorizar a vehículos prioritarios y de auxilio en vías públicas (grúas) a usar también los arcenes para servicios de urgencias, siempre que cumplan ciertas condiciones de seguridad: deberán utilizar sus señales luminosas y reflectantes correspondientes y no pasarán de 30 km/h (excepto los prioritarios)”.
Reducir o suprimir arcenes para ejecutar vías ciclistas adyacentes
Pues bien, cuando esta norma no se ha autorizado oficialmente todavía, hoy conocemos a través de una información de eldiario.es que la DGT va a introducir otra importante novedad en relación al uso de los arcenes, en este caso además ya oficializado incluso por sorpresa en el Boletín Oficial del Estado (BOE). La gran novedad en este caso es que una nueva disposición “habilita ya a reducir o suprimir arcenes para ejecutar vías ciclistas adyacentes, reordenando por dónde circularán los ciclistas en la Red Estatal”.

Así, con el objetivo de que la bicicleta siga ganando peso en la movilidad, y con vistas también a dar respuesta al conflicto que hay actualmente en las carreteras entre automovilistas y ciclistas sobre todo durante los fines de semana, la DGT ha previsto ya la posibilidad de reordenar la circulación de los ciclistas en carreteras nacionales para garantizar de modo más efectiva la seguridad.
Hasta ahora, las normativas de tráfico no obligan a usar carriles bici cuando los haya, pero sí recomienda circular por ellos al ser más seguros. En ciudad, la legislación sí exige que las bicicletas circulen lo más próximo a la derecha de la vía, dejando una separación de seguridad con el bordillo o con los vehículos estacionados, mientras que en carretera deben utilizar obligatoriamente el arcén de la derecha, si es que existe, solo pudiendo abandonarlos en descensos prolongados en condiciones seguras y siempre permitiendo circular solo en filas de dos, orillándose siempre todo lo posible a la derecha de la vía.
Objetivo: garantizar una red continua y segura para los ciclistas
El nuevo documento publicado ya en el BOE enmarca ahora esta nueva iniciativa en planes como la Estrategia Estatal por la Bicicleta y la estructura orgánica aprobada por el Real Decreto 253/2024, de 12 de marzo, fijando una disposición adicional con los principios que regirán a partir de ahora la planificación, construcción y explotación de estas nuevas vías ciclistas con el objetivo de garantizar una red continua y segura en ámbitos urbano, periurbano e interurbano, en coordinación con otras administraciones.

Según la información de eldiario.es, el BOE, textualmente, recoge ahora que “en carreteras multicarril y carreteras convencionales con una intensidad media diaria reducida en las que se considere especialmente conveniente incluir un itinerario ciclista o dar continuidad a uno ya existente, para la ejecución de vías ciclistas adyacentes a las carreteras del Estado podrán disminuirse o suprimirse los arcenes preexistentes, justificando que no se perjudican las condiciones de seguridad viaria o la adecuada explotación de la carretera”.
La finalidad es trasladar cuando sea posible la circulación de los ciclistas a estos nuevos carriles específicos, para que circulen por él los usuarios tanto si van solos como en grupetas, donde seguirá rigiendo la obligatoriedad de hacerlo en paralelo de dos en dos como máximo. Desde la DGT, eso sí, recalcan que solo eliminarán o reducirán los arcenes cuando no se comprometa en las vías la seguridad vial ni se condicione el trazado habitual de las carreteras.