Nissan tiene muchas esperanzas puestas en el nuevo Leaf. Convertido por méritos propios en uno de los pioneros de los coches eléctricos, en esta nueva etapa va a transformarse de las formas de un compacto a un SUV, que probablemente tendrá un cierto aire de coupé para mejorar la aerodinámica.
Y para ir creando expectación en la marca japonesa han decidido ir publicando detalles concretos del coche como si de unos fascículos se tratasen. En el primero, que publicamos la semana pasada, nos desvelaron detalles como la firma lumínica, las líneas de su carrocería, su gran techo panorámico o que su autonomía podría alcanzar los 482 kilómetros cuando sea homologada.
El corazón del nuevo Nissan Leaf
Si bien es importante conocer la autonomía del próximo Leaf, no lo es menos su sistema de propulsión. Desde la firma asiática nos han comentado que se trata de un nuevo bloque eléctrico que han calificado como 3 en 1, que gracias a este concepto de diseño ha permitido que sea un 10% más pequeño que el montado en su antecesor. Y nos han confirmado que podrá alcanzar una potencia de 160 kW (218 CV) y 355 Nm de par, con un pequeño apunte: “en variantes seleccionadas”. A nosotros esas tres palabras nos dan a entender que quizás sobre la misma base se ofrezcan otras opciones menos potentes y, por tanto, más económicas.
Otro de los puntos en los que se han centrado muchos de los esfuerzos de los ingenieros ha sido en conseguir un habitáculo más silencioso y refinado, algo bastante importante en un coche eléctrico. Para los amantes de los datos, en recorridos urbanos a 50 km/h se ha conseguido una mejora de 2 decibelios.
Y dentro de este esquema interior de las tripas del Leaf, nos han confirmado que los elementos que forman parte del sistema HVAC (la calefacción, la ventilación y el aire acondicionado) se colocaron bajo el capó, en lugar de hacerlo detrás del panel de instrumentos como suele ser habitual. Así lo que se consigue es un habitáculo todavía más grande.
Un chasis mucho más avanzado
Es probable que este nuevo Leaf mejore considerablemente la rodadura de la segunda generación. A modo de recordatorio, antes se colocaba en el eje delantero un sistema McPherson, pero detrás “solo” tenían un resorte helicoidal. Ahora, gracias a la utilización de una plataforma más avanzada como es la CMF-EV, la misma que tiene el Ariya, se podrá montar un avanzado multibrazo que de paso mejora en un 66% la rigidez lateral. Eso se traducirá en mayor agilidad y confort de marcha.
Otro detalle más para el día a día es que, aunque se hayan montado llantas grandes de 19 pulgadas, se ha conseguido reducir su radio de giro 0,1 metros, lo que permite maniobrar mucho mejor en entornos urbanos. La culpable de esta mejora es la dirección, que sigue siendo de cremallera con asistencia eléctrica.
Y el último avance sobre el que han querido poner el foco ha sido el sistema de refrigeración de las baterías del nuevo Leaf. Este es capaz de aprovechar el calor producido por el cargador de a bordo para calentar la pila, lo que mejora el potencial en materia de autonomía en climas más fríos.
En Nissan nos han prometido que habrá una tercera entrega con más detalles del nuevo Leaf, entre los que esperamos que nos presenten ya más detalles del interior y cómo sería su puesto de mando. Lo que está claro es que el 18 de junio lo veremos al completo, pues es el día de su estreno mundial.
