Este 2025 se dará el pistoletazo de salida a los coches pequeños eléctricos del Grupo Volkswagen. Si bien el consorcio alemán ya tuvo representantes en la talla más pequeña con aquellos Seat Mii, Volkswagen e-up o Skoda Citigo, ahora con la plataforma MEB Small parece que la apuesta será definitiva y con el fin de que dure muchos años más que los modelos citados.
Y aunque llevamos ya un tiempo hablando de ellos, todo hace apuntar que este año veamos a sus primeros integrantes con los Volkswagen ID.1 e ID.2, el Cupra Raval y el Skoda Epiq. Este cuarteto de modelos se está desarrollando desde los cuarteles generales de Seat en nuestro país y posteriormente su producción se trasladará tanto a Martorell como a Landaben, por lo que todo queda en nuestras fronteras.

De todos ellos parece que el que tendrá el honor de ser el primero en lanzar al mercado la plataforma MEB Small será el Cupra Raval y no el Volkswagen ID.2 como se había pensado en un primer momento. Al utilitario español le han cazado en su última fase de pruebas en carreteras abiertas nuestros compañeros de Auto Motor und Sport y han extraído varios detalles el diseño que puede tener definitivamente.
A pesar de que contaba con extenso camuflaje, se intuye que las formas del prototipo Urban Rebel se han respetado bastante. Empezando por la iluminación, los LED se han modificado ligeramente y también se ha retocado la abertura de aireación. En los laterales, se ha reducido un poco la anchura y se mantienen las cuatro puertas, aunque finalmente con marco en la serie. Detrás, el alerón de dos piezas del concept se fusiona en una, con unas luces distintas, un portón trasero más liso y un faldón menos agresivo.

Respecto a su motor o gama de motores todavía se mantienen en secreto. Si nos ceñimos a los datos del prototipo antes mencionado contaba con un solo motor bajo el capó delantero que le proporcionaba nada menos que 172 kW (234 CV). Así de primeras puede parecer una potencia exagerada para un utilitario, pero quizás esa podría tratarse de la más potente y luego completar la gama con otras más asequibles. Tampoco hay datos sobre las baterías, pero los primeros apuntes indican que se estaría buscando que la versión más eficiente rondara los 440 kilómetros.
Lo que sí parece claro en estos cuatro vehículos es que la plataforma MEB Small cambiará su eje de tracción. Mientras que en la MEB “original” se ofrecían versiones de propulsión o con tracción total, la idea que tienen para los pequeños del grupo es que sean manden su fuerza a las ruedas delanteras.

Una vez conozcamos al “baby” Cupra todavía no se sabe exactamente qué modelo le seguirá, pero por lógica debería ser el Volkswagen ID.2, modelo de la misma categoría. Aunque según la publicación alemana no debería pasar mucho tiempo más hasta que veamos por primera vez al Skoda Epiq y al Volkswagen tipo SUV eléctrico, cuyo nombre todavía sigue siendo una pequeña incógnita.
De esta manera se podrán cumplir las palabras que en su día comunicó Thomas Schäfer, jefe de Volkswagen, indicado que “nuestro objetivo es hacer que la electromovilidad sea posible para todos. Nuestro grupo está muy comprometido con España y el apoyo continuo del Gobierno de este país está siendo crucial. Y de paso hacemos un llamamiento a Europa para que se ciña a la electromovilidad como palanca clave para hacer realidad el Pacto Verde”.

Para hacernos una idea de estos datos hay que recordar que en la planta de Martorell se han invertido ya tres mil millones de euros para adaptarla a los nuevos tiempos, una cifra que significa el doble de lo que costó construirla hace 30 años. En esta transformación los Seat Ibiza y Arona han tenido que desplazarse a otra línea de montaje para dejar hueco a los eléctricos.