Qué son los radares rotatorios que usan muchos ayuntamientos para jugar al escondite con las multas

Hoy te hemos dado la noticia: los ayuntamientos están convirtiendo los radares en verdaderas máquinas de recaudación. Para ello, la técnica que emplean ya es la de los cinemómetros rotatorios.

Qué son los radares rotatorios que usan muchos ayuntamientos para jugar al escondite con las multas
Qué son los radares rotatorios que usan muchos ayuntamientos para jugar al escondite con las multas

Por si no lo has leído esta mañana, te volvemos a dar la noticia: hay ayuntamientos que están teniendo ya tantos problemas para poder gestionar las multas que ponen sus radares de velocidad que están comenzando a surgir nuevas iniciativas para externalizar la recaudación municipal ante la imposibilidad de tramitar y gestionar a tiempo todas las sanciones. Así es de contundente.

Y es que si hasta ahora el foco del interés y del afán recaudatorio se ha puesto siempre en la DGT, desde hace tiempo esta corriente hay que empezar a extenderla también a numerosos ayuntamientos de toda España. Porque sí, es verdad que la DGT recauda al año más de 507 millones de euros en multas de tráfico, de las que 2 de cada 3 corresponden a sanciones por exceso de velocidad. Pero también lo es que los ayuntamientos ya hoy no se quedan ni mucho menos atrás al comprobar cuánto dinero suponen a sus arcas municipales.

Los ayuntamientos ejercen más presión recaudatoria incluso que la DGT

De hecho, un reciente estudio de DVuelta ha denunciado que las 10 mayores capitales de provincia de España en realidad recaudan al año ya más de 360 millones de euros en multas, ejerciendo así en realidad una presión recaudatoria mucho más elevada que la DGT, al contar con una población de 9 millones de habitantes con un parque de automóviles de 5,5 millones, cuando desde Tráfico apuntan a una población de 47 millones de habitantes y a más de 35 millones de coches en vigilancia. Estas ciudades son Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Zaragoza, Málaga, Murcia, Palma de Mallorca, Las Palmas de Gran Canaria y Bilbao.

Radar oculto tras unos contenedores en Valencia.
Los ayuntamientos elevan cada año la recaudación en multas con la compra de nuevos radares que ocultan.

Profundizando incluso en este mismo análisis de manera algo más profunda, los resultados totales de multas arrojan que, por ejemplo, Madrid recauda en sanciones hasta 101,2 euros de media por cada vehículo al año, seguida de Bilbao, con 69,4 euros; Barcelona, 68,9 euros , y Palma de Mallorca, 60,9 euros.

El problema de la importancia que tiene toda esta posible recaudación en las arcas municipales ha llevado incluso ya la Guardia Civil, a través de su Asociación Unificada AUGC, a denunciar que en España se está “primando la recaudación de la sanción, frente a la función real de los agentes, que debería primar la prevención”. Y, como hemos avanzado, esta realidad ya no es exclusiva de la DGT… ni mucho menos.

Así funcionan los radares rotatorios en España

Muchos ayuntamientos, ante la vía tan importante de recaudación que se abre en torno a los radares, y más desde que la nueva Ley de Tráfico redujese los límites en muchas calles a 20 y 30 km/h, han procedido a la compra de nuevos aparatos, que en estos casos ni son fijos, ni disponen de carteles de aviso, ni siquiera se emplazan en los mismos sitios habitualmente. Son lo que podríamos denominar como radares rotatorios, que ocultan las policías municipales ubicándolos en localizaciones diferentes para sorprender a los conductores.

Motos camufladas o Veloláser escondidos, graban nuevos radares ocultos de la DGT y de la policía
Fotomontaje con distintos radares ocultos y rotatorios, que se mueven por distintas localizaciones para sorprender a los conductores.

Las imágenes de poblaciones con este tipo de radares rotatorios ocultos y escondidos tras contenedores de basura, por detrás de vehículos aparcados, en farolas o tras marquesinas de autobuses, por poner solo algunos ejemplos, son a día de hoy muy comunes y virales en redes sociales, donde plataformas como SocialDrive se dedican a delatarlos.

Incluso hay ya ayuntamientos que están avisando a la población sobre estas prácticas, como ha ocurrido recientemente en la localidad madrileña de Boadilla del Monte. Allí, el propio ayuntamiento ha informado en un comunicado que dispone ya de tres radares de control de velocidad para la localidad, que instala de manera rotatoria en distintos puntos de la ciudad para, supuestamente, reducir el número de accidentes ante el crecimiento que ha experimentado la población y los nuevos accesos que tiene.

Además de anunciar alguna posible localización habitual, como en las avenidas D. Luis, Miguel Ángel Cantero Oliba y Montepríncipe, además de en las calles Manuel de Falla y Playa de Formentor, el ayuntamiento directamente anuncia que “pueden instalarse también de forma aleatoria en cualquier zona del municipio”. Ya sabes, son muchos los pueblos y ciudades de España que han decidido jugar al escondite… y siempre tienen las de ganar. La vas a tener que pillar tú.

 

Archivado en:

Hay radares que ponen ya tantas multas que los ayuntamientos comienzan a externalizar la recaudación FOTO SocialDrive

Relacionado

Hay radares que ponen ya tantas multas que los ayuntamientos comienzan a externalizar la recaudación

Así son los nuevos radares que envían automáticamente ya las multas a casa

Relacionado

Así son los nuevos radares que envían automáticamente ya las multas a casa