Rivian nació en 2011 como un nuevo fabricante automovilístico para crear modelos eléctricos y autónomos. Tras varios años intentando establecer una base, finalmente en 2018 presentó el R1T, un pick-up que más adelante sería acompañado por el SUV R1S. Desde entonces ha llegado a entrar a cotizar en el Nasdaq, pero las deudas están empañando el futuro de la compañía. Del otro lado tenemos a Volkswagen, que tras el Dieselgate perdieron su liderato mundial a favor de Toyota, y que les está costando mucho asentar su nueva gama de eléctricos.

Ante tal situación ambas marcas han decidido unirse para crear una empresa conjunta con una participación igualitaria (50-50) que les permita la creación de coches eléctricos con baterías de nueva generación. Para ello, los alemanes invertirán un total de 5.000 millones de dólares (unos 4.675 millones de euros), para la creación de esta nueva “joint-venture” que se podría formalizar en el cuatro trimestre de este 2024.
Tras este primer anuncio ya ha habido las primeras consecuencias. Para Rivian ha sido todo un espaldarazo en el índice Nasdaq, creciendo en algunos momentos por encima del 30%, mientras que en la bolsa de Frankfurt los accionistas de Volkswagen no piensan de la misma manera, perdiendo valor sus acciones tanto ayer como hoy.

Pese a esta situación, nosotros vemos aspectos positivos en la unión de estos dos fabricantes. Por un lado, de todos es sabido el problema que está teniendo Volkswagen con su software para coches eléctricos, que les está dejando por detrás de su competencia en un momento en el que las pantallas están tomando mucho protagonismo y ahí es donde Rivian puede ayudar bastante porque sus sistemas son mucho más avanzados. También permitiría el grupo germano volver a expandir su presencia en Estados Unidos, un mercado que quedó algo tocado tras la crisis de las emisiones antes comentada y, de paso, reducir su dependencia del mercado chino.
En cuanto a Rivian, tras anuncios de deudas y despidos, esta inversión que realizará Volkswagen les vendrá muy bien para poder asegurar el futuro de la compañía e incluso crecer, como vamos a ver a continuación.

Rivian pasa al ataque
Poco después de anunciarse la creación de la empresa conjunta con Volkswagen, Rivian ha desvelado en el Día del Inversor (una copia de Tesla claramente) una gama que podría abarcar hasta 12 modelos eléctricos en los próximos años con los que esperan llegar a muchos más clientes y segmentos en todo el mundo.
Partiendo de los R1 que comenté al principio del artículo, a los que se une la furgoneta de reparto que crearon junto con Amazon, se unen otros dos coches de la gama R2 y otros tantos de la R3. Pues precisamente estas dos últimas acogerán próximamente otro modelo más cada una, a los que se uniría una nueva gama (quizás se podría llamar R4) que la marca ha definido como los coches para un mercado masivo y asequible.