La advertencia del sector del automóvil es contundente: la propuesta actual de la normativa Euro 7 de emisiones contaminantes, aunque finalmente ha sido algo menos exigente de lo que inicialmente se preveía, “puede llevar al cierre de fábricas y a la consecuente pérdida de empleo”. Así lo han manifestado en las últimas semanas los representantes de la industria española del automóvil y, por eso, ayer se produjo en Madrid una importante reunión junto a muchos altos cargos del Gobierno.
Más restrictiva que antes en materia de emisiones, el objetivo del encuentro de alta representación en el que, no solo estuvo presente el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sino también las ministras de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, y la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, además del secretario General de Industria, Francisco Blanco, y el secretario General de Asuntos Económicos, Manuel de la Rocha, era encontrar nuevas “soluciones óptimas y realistas” para abordar el futuro de la norma Euro 7, tal y como anunció el propio presidente del Ejecutivo.
Tras la reunión, en la que participaron también por parte de la industria los presidentes de ANFAC, Wayne Griffiths; de Sernauto, Francisco J. Riberas; y de Adive, Adriano Mones, Pedro Sánchez se comprometió ante el sector a trabajar durante toda la próxima presidencia española de la UE (que se celebrará en el segundo semestre del año) a tratar de hacer “compatibles las inversiones para la transición hacia el vehículo cero emisiones con los límites a las emisiones contaminantes”.

Habrá nueva normativa para instalar puntos de recarga
El Gobierno se ha comprometido así a identificar y trabajar en “nuevas medidas que aceleren la electrificación del sector”, asegurando y confirmando que, “en breve”, el Ministerio de Transportes, Urbanismo y Movilidad Urbana publicará una nueva normativa que agilizará la instalación de puntos de recarga en la red de carreteras del Estado. En este sentido, el Ejecutivo también se compromete a impulsar la digitalización para que entre lo antes posible en funcionamiento el nuevo geoportal con el que los usuarios podrán localizar rápidamente los puntos de recarga que hay por todo el país y su estado.
Otro de los problemas actuales en los que incide el sector es en la lenta tramitación actual que se produce en la aprobación de puntos de recarga. En este sentido, el Gobierno asegura que la Comisión Nacional de los Mercados y Competencia (CNMC) se compromete ya a publicar una nueva circular de acceso y conexión a la red “para facilitar la tramitación”. Por su parte, al mismo tiempo, la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) ha acordado también informar y formar a técnicos municipales para facilitar también estos trámites en los ayuntamientos para eliminar actuales “cuellos de botella”.
Se reforzarán los incentivos a la compra de coches eléctricos
Pero no solo de puntos de recarga debe vivir el automóvil en los próximos años, sino que urge también que los usuarios puedan acceder a la compra de vehículos más ecológicos. Para ello, el Gobierno se ha comprometido con la industria a avanzar también en un refuerzo del programa de incentivos a la compra de vehículos eléctricos (sí, y también de instalación de puntos de carga), ampliando las posibilidades por ejemplo del Plan Moves III para que se puedan electrificar las flotas empresariales hasta los 250 coches, y permitir que los vehículos seminuevos puedan ser igualmente subvencionados para “incrementar así la oferta en el mercado”.

Pedro Sánchez ha concluido el encuentro remarcando “el carácter estratégico de la automoción y su electrificación”, asegurando que las intenciones del Gobierno ya quedan plasmadas en el actual PERTE VEC, “que fue el primero en aprobarse”, así como en “los planes MOVES”.