De momento, la propuesta del Partido Popular para el automóvil se ha registrado como una proposición no de ley que deberá debatirse en la Comisión de Industria, Comercio y Turismo. Sin embargo, salga o no adelante, lo que es evidente es que dibuja ya las líneas maestras para el sector del principal partido de la oposición, permitiendo conocer los planes que podrían aplicarse en próximos años en el caso de que Alberto Nuñez Feijoo alcance en algún momento la presidencia del Gobierno.
La nueva proposición no de ley registrada por el PP lleva así al Congreso de los Diputados un nuevo plan de rebajas fiscales al automóvil y a los carburantes entre los que destaca, principalmente, la petición de supresión del actual Impuesto de Matriculación y su sustitución a modo de compensación por una “nueva tasa medioambiental que se aplicaría de forma gradual, para gravar después de un período transitorio a los coches más contaminantes y menos seguros”.
El documento, al que ha tenido acceso Europa Press, pretende la implantación de esta nueva tasa vinculada a los automóviles en uso y circulación, con el objetivo principal de “favorecer la renovación del parque automovilístico, pudiéndose introducir bonificaciones para las familias vulnerables”. El PP considera que el actual Gobierno de España está “persiguiendo” y “demonizando” a los profesionales del sector y a los usuarios y propietarios de vehículos privados.
Adiós al Impuesto al Diésel o a los nuevos peajes
El paquete de rebajas fiscales contemplados en esta proposición no de ley también plantea ya la renuncia a la aplicación de varias de las propuestas que el Gobierno ha trasladado a través de Hacienda en el marco de la elaboración del Libro Blanco para la reforma fiscal y en la negociación con la Unión Europea para la negociación de los fondos del Plan de Recuperación.
Entre estas medidas a suprimir figurarían, según informa Europa Press, el denominado Impuesto al diésel (es decir, la equiparación fiscal del diésel y la gasolina), el aumento de las tasas a los hidrocarburos, la subida del Impuesto de Matriculación y de Circulación, la creación de nuevos tributos municipales contra el tráfico y, especialmente, el plan de peajes previsto para las carreteras de España.
La propuesta del PP, asimismo, incluye nuevas deducciones fiscales en el IRPF y en el Impuesto de Sociedades para el gasto en vehículos electrificados e instalaciones de recarga, así como mejoras en las deducciones en pagos en especie para estos vehículos, permitir la deducción del 100% del IVA al comprar estos vehículos y la amortización acelerada en sociedades para este tipo de inversiones.
