Fin a un culebrón que lleva ya décadas de conflicto y polémica en la Comunidad de Madrid. Desde que se iniciara la obra de la M-50 en el año 1990, la carretera también denominada Circunvalación de Madrid ha permanecido finalmente con un trazado de 85 kilómetros con forma de herradura abierta por el norte. De titularidad estatal, perteneciente a la Dirección General de Carreteras del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, siempre quedó el interrogante de si el anillo algún día se cerraría.
De hecho, fue la propia Comunidad de Madrid presidida por Esperanza Aguirre quien, entre su mandato de 2003 a 2012, estudiaron durante tiempo la opción de cerrar la circunvalación entre la A-6 y la A-1, pasando por debajo del monte de El Pardo mediante la construcción de un túnel, que sería gestionado por una autopista de peaje físico. Paralizado en su día el proyecto por los graves problemas económicos y medioambientales que enfrentaría una construcción de este calibre, la petición seguía no obstante vigente a día de hoy por parte de distintos ayuntamientos y colectivos.
Nuevas peticiones para cerrar la M-50 en la Comunidad de Madrid
Quien más ha estado luchando por este cierre ha sido en concreto el Ayuntamiento de Tres Cantos, quien, a través de su alcalde, el popular Jesús Moreno, lleva años solicitando el final de esta obra en el tramo entre la A-1 y la M-607 para así “poder reducir los atascos diarios” que se registran en esta zona norte de la comunidad, especialmente en los entornos de las poblaciones de Tres Cantos y Colmenar Viejo.

Esta reivindicación le ha llevado a solicitar por carta formalmente el pasado día 10 de junio al ministro de Transportes del Gobierno de España, Óscar Puente, que estudiase el cierre aunque sea parcial de la M-50, “como alternativa necesaria a los constantes problemas e incidencias de la M-607”.
El Ministerio de Transportes lo rechaza por su complejidad técnica y ambiental
Sin embargo, este sueño quedará en eso, en un simple sueño. El Ministerio de Transportes ha rechazado finalmente, y una vez más, el cierre de la M-50 por la complejidad técnica y ambiental que supone. En concreto, la contestación ha llegado a través del Director General de Carreteras, Juan Pedro Fernández Palomino, argumentando “la complejidad técnica que tendría que desarrollar un trazado con todos los condicionantes orográficos existentes en el entorno”. Sería de “un gran impacto ambiental”.
El alcalde de Tres Cantos aseguraba en su reivindicación que la M-607 es actualmente la “única vía de conexión por carretera para los vecinos de Tres Cantos y otros municipios aledaños”, constatando que cualquier accidente provoca numerosas retenciones y atascos. Además, ofrecía presentar al Gobierno “las actuaciones que pensamos contribuirán a mejorar la movilidad de esta zona estratégica de la región”.
La M-50, por tanto, se confirma definitivamente que no se ampliará ni cerrará su trazado en forma de anillo.