Vivimos tiempos complicados, la economía se resiente y, en consecuencia, el sector del automóvil lo padece. La crisis causada por el COVID-19 tendrá unas repercusiones difíciles de calcular: de momento, ya podemos hablar de que las ventas de coches en España han cedido un 96,5 por ciento en el pasado mes de abril.
La Unión Europea ya planea mover ficha para intentar reactivar el mercado automovilístico, y eso podría pasar por un impulso definitivo por el vehículo eléctrico. Hasta el día de hoy, veníamos hablando de un porcentaje de ventas que se movía entre el 1 y el 5 por ciento en los diferentes países, a excepción de, por ejemplo, Noruega, donde los eléctricos suponen más del 40 por ciento de las ventas.
Según el documento interno de la Comisión Europea, los paquetes de medidas para la protección y recuperación del sector pasan por poner el vehículo eléctrico en el centro de la diana para todo el Viejo Continente. Se habla de una cifra de hasta 100.000 millones de euros para inyectar en el sector del automóvil, que afronta en las próximas décadas además el reto de luchar contra el cambio climático.
Todo esto, en un contexto en el que, por ejemplo, en España se ha aprobado (por parte del Consejo de Ministros) el anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética: en este se habla de que los coches que se vendan a partir del 2040 deberán ser de emisiones cero.
Así pues, aprovechando las medidas para recuperar la industria, y de cara a dar un impulso más que importante al terrenodel vehículo eléctrico, la Unión Europea se plantea una medida drástica: eliminar el IVA de este tipo de los “coches más limpios". ¿Están incluidos también a otro tipo de tecnologías eficientes de movilidad?
La supresión del IVA en los países de la UE afectará en mayor o menor medida, pero lo que sí supondrá es una rebaja importante del precio. Por ejemplo, en España el IVA se cifra en un 21 por ciento (a excepción de Canarias, cuyo IGIC funciona de forma diferente); en la parte más alta de la lista está Hungría, con un 27 por ciento de IVA general, o Croacia, Dinamarca o Suecia, con el 25 por ciento. Las medidas de la Unión Europea irían también de la mano de apoyar el desarrollo de nuevas tecnologías de propulsión de cero emisiones, así como de la instalación de puntos de recarga públicos.