Desde que se liberaron los peajes en la AP-7 en agosto de 2021, la movilidad ha aumentado un 26 por ciento en esta autopista. Pero también la siniestralidad. En 2019 hubo 503 accidentes con víctimas, 32 de los cuales con personas muertas o heridos graves, mientras que en 2022, estos siniestros aumentaron hasta los 647, 55 de los cuales con muertes o heridos graves.
Estas cifras han llevado al Servicio Catalán de Tráfico a poner en marcha un paquete de acciones para reducir la siniestralidad en la AP-7. Y una de ellas es limitar la velocidad a 100 km/h en la AP-7, entre Martorell y Gelida, los viernes por la tarde, sábados por la mañana y domingos por la tarde. Además, los camiones tendrán que circular por la derecha en ese tramo de unos 7 kilómetros. La medida empezará a aplicarse este mismo viernes en fase de pruebas.
El SCT espera que esta medida ayude a mejorar la seguridad viaria en este tramo, donde, según su director, Ramón Lamiel, han observado que los vehículos no respetan la distancia de seguridad y corren demasiado, y no descartan bajar más el límite de velocidad si estos 100 km/h no son suficientes. Tráfico y Mossos harán controles de la velocidad para controlar que la limitación se cumpla.
El plan de medidas anunciado por el SCT se desplegará entre el 2023 y 2025 con una inversión de 14,3 millones de euros y, además de limitar la velocidad a 100 km/h en ese tramo, también prevé otras como utilizar drones para controlar los puntos más conflictivos e instalar nuevos radares en la autopista.
Más radares y uso de drones
Como hemos dicho, el Servicio Catalán de Tráfico instalará nuevos radares en esta autopista, en aquellos puntos donde se registran más accidentes. Empezará con cuatro, y una de las primeras localizaciones en las que se ubicarán será la trifurcación del Papiol B-23 / En-2 / AP-7. También se instalará un radar de tramo en la zona de Mora a Constantí en el periodo 2023-2025.
También se usarán drones para controlar puntos viarios conflictivos. Primero, en el enlace de la C-60 a la AP-7, y también en el de la B-23 y AP-7 para controlar las infracciones de incorporación, que son un riesgo para la seguridad viaria y ocasionan retenciones.
Limitaciones para los camiones
El plan prevé además limitaciones de vehículos pesados en el tramo del sur de 30 kilómetros entre Calafat y Camarles (Baix Ebre), donde los camiones tendrán que circular por el carril de la derecha. Esta limitación será para todos los días de la semana y se empezará aplicar pronto, si bien no han concretado una fecha.