Los motores diésel y sus emisiones han dado para escribir muchas noticias. Y pese a que en la actualidad cada vez son más minoritarios, desde la Unión Europea los siguen teniendo en el punto de mira. Su última “ocurrencia” es proponer a nuestro país el cambio en la prueba de la ITV que se encarga de medir los gases del escape, que seguramente tenga como objetivo endurecerla un poco más.
Como es conocido, todos los coches, independientemente del combustible fósil que usen, tienen que superar una prueba de emisiones dentro del procedimiento protocolario de la ITV. Pero como han señalado desde el Ministerio de Industria y Turismo, ahora se quiere "establecer un procedimiento de inspección de vehículos para comprobar la cantidad de partículas contaminantes que emiten, que cumpla con los requisitos establecidos en la Directiva que lo regula, es decir, que sea un procedimiento relativamente simple, rápido y barato, a la par que efectivo".

En realidad, esta recomendación, así como toda su reglamentación, ya fue publicada en el DOUE (Diario Oficial de la Unión Europea) en su número 90 del 28 de marzo de 2023 y puedes consultarla aquí. Lo que nos trasladan ahora desde la Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos (AECA-ITV) es que ha comenzado un proyecto piloto en varias ITV de nuestro país en donde se va a realizar esta nueva prueba.
La idea es que esta prueba piloto dure varios meses con el objetivo, según nos confirman desde AECA-ITV, es de obtener datos sobre el estado del parque de vehículos de nuestro país. Por ello, a estas instalaciones se han incorporado equipos específicos, que ya se usan en otros países europeos, con el fin de poder completarla.

Si te estás empezando a alarmar ante una nueva prueba de la ITV, estate tranquilo porque te voy a dar dos datos importantes. Para empezar, la nueva prueba es muy similar en cuanto a su dinámica a la que se realiza actualmente con el opacímetro. El procedimiento repite lo de introducir una sonda por el escape de nuestro vehículo y tras conseguir dejar el vehículo a las revoluciones que nos indiquen saldrá el valor que guardarán para los estudios.
El segundo aspecto importante es que se trata de una prueba que todavía no está incluida en el Manual de Procedimiento de Inspección de las Estaciones de ITV, por lo que, aunque nuestro vehículo no fuera capaz de superarla según los límites establecidos por la Unión Europea, no conllevará que nos denieguen la ITV.

Teniendo claro todo esto hay que indicar que esta nueva prueba piloto tampoco se realizará a todos los vehículos diésel del parque español. Solo está destinada, según se indica en la normativa, a “los vehículos de las categorías M y N (turismos y comerciales) equipados con motores de encendido por compresión y filtros de partículas diésel. Vehículos ligeros matriculados por primera vez a partir del 1 de enero de 2013 (Euro 5b y más recientes) y a los vehículos pesados matriculados por primera vez a partir del 1 de enero de 2014 (Euro VI y más recientes)”.