Saber qué es un catalizador y cuál es su función en el coche es fundamental para entender cómo se reducen las emisiones contaminantes. Este componente forma parte del sistema de escape del coche y su misión es transformar los gases nocivos del motor en sustancias menos perjudiciales antes de expulsarlas al exterior.
Desde hace décadas, su instalación es obligatoria en los vehículos de gasolina y diésel modernos. Sin embargo, muchos conductores desconocen su importancia para cumplir con las normativas medioambientales y superar la ITV sin problemas.
El catalizador dentro del sistema de escape
El catalizador es un tubo metálico que se encuentra integrado en el sistema de escape del vehículo, cerca del motor para aprovechar el calor. En su interior, contiene un núcleo cerámico recubierto de metales preciosos como platino, paladio y rodio, que actúan como catalizadores químicos.
Su función principal es reducir las emisiones contaminantes, transformando los gases tóxicos generados durante la combustión en compuestos menos dañinos, como dióxido de carbono (CO₂), nitrógeno (N₂) y vapor de agua (H₂O).
Cómo funciona un catalizador
El proceso es químico y térmico. Cuando los gases calientes del motor pasan por el catalizador, los metales internos provocan reacciones de oxidación y reducción que convierten los óxidos de nitrógeno (NOx), el monóxido de carbono (CO) y los hidrocarburos (HC) en sustancias menos peligrosas.
Para que estas reacciones se produzcan correctamente, el catalizador debe alcanzar unos 400 ºC, razón por la cual se instala cerca del motor. Un catalizador en buen estado asegura un rendimiento óptimo del coche, un consumo equilibrado y emisiones dentro de los límites permitidos.
Síntomas de un catalizador en mal estado
Con el tiempo, el catalizador puede obstruirse, deteriorarse o fracturarse. Algunos síntomas de fallo incluyen:
- Pérdida de potencia al acelerar.
- Aumento del consumo de combustible.
- Olor fuerte a azufre o “huevos podridos” por la liberación de sulfuro de hidrógeno.
- Humo excesivo o ruidos metálicos en el escape.
- Encendido del testigo de fallo motor en el cuadro de instrumentos.
Detectar estos signos a tiempo es imprescindible para evitar averías mayores y aprobar la ITV.
Coste de reparación del catalizador y riesgos de robo
El catalizador es una de las piezas más valiosas del sistema de escape por los metales preciosos que contiene. Esto ha provocado un incremento de los robos de catalizadores, especialmente en vehículos con acceso sencillo al tubo de escape.
El precio de sustitución varía entre 200 y 700 euros, pero con mano de obra puede superar los 1.000 euros. Circular con un catalizador dañado o sin él aumenta la contaminación, el gasto de combustible y el riesgo de dañar el motor.
Mantenimiento y vida útil del catalizador
La vida útil del catalizador suele situarse entre 120.000 y 200.000 kilómetros, dependiendo del tipo de conducción y del mantenimiento del vehículo.
Para prolongar su duración, se recomienda:
- Usar combustible de buena calidad.
- Evitar trayectos cortos y arranques continuos en frío.
- Revisar el sistema de escape cada 100.000 km.
- Sustituirlo cuando aparezcan síntomas de fallo o se detecten ruidos metálicos.
El mantenimiento preventivo ayuda a conservar el catalizador en condiciones óptimas y a reducir las emisiones contaminantes.
¿Es obligatorio llevar catalizador en el coche?
Sí. Desde los años 90, todos los vehículos de gasolina y los diésel modernos deben llevar catalizador como parte de su sistema de control de emisiones. Circular sin él supone una infracción grave, sancionable con multa e incluso inmovilización del vehículo.
El catalizador es esencial para aprobar la ITV y cumplir con las normativas medioambientales europeas. Además, su correcto funcionamiento influye en otros elementos del sistema de escape, como el silenciador o las partes del sistema de escape que contribuyen al sonido del escape del coche.










