Cualquier conductor responsable debe conocer la diferencia entre diésel y gasolina, ya que el tipo de combustible que se utiliza afecta directamente el rendimiento, mantenimiento y longevidad de un vehículo.
Aquí te explicaremos las diferencias principales entre estos dos tipos de combustible y te orientaremos sobre cómo asegurarte de que estás utilizando el correcto para tu coche.
¿Cómo saber si un coche usa diésel o gasolina?
El método más simple para identificar el tipo de combustible que utiliza un coche es revisar la ficha técnica, donde se especificará. Otras indicaciones pueden encontrarse en la tapa del tanque de combustible o en el cuadro de instrumentos, donde normalmente hay etiquetas que indican el tipo de combustible recomendado.
Además, las boquillas de los surtidores de gasolina suelen ser más pequeñas que las de diésel, lo cual es un indicativo práctico en las estaciones de servicio.
Diferencias clave entre diésel y gasolina
Pero, ¿por qué es tan importante conocer qué carburante lleva un coche? Veamos las diferencias entre el diésel y la gasolina:
Procesos de obtención
Tanto el diésel como la gasolina derivan del petróleo crudo, pero se extraen en diferentes etapas del proceso de refinamiento. La gasolina se obtiene antes y resulta más volátil y ligera, mientras que el diésel se extrae después y es más denso y pesado.
Sistemas de combustión
Los motores de gasolina utilizan bujías para encender el combustible mediante una chispa eléctrica. En cambio, los motores diésel no utilizan bujías y dependen de la alta compresión del aire dentro de los cilindros para calentar el combustible y provocar la combustión.
Rendimiento y eficiencia
Los motores de gasolina son más populares por su capacidad de aceleración rápida y su construcción más ligera. Sin embargo, en términos de eficiencia de combustible, los motores diésel son superiores, ya que ofrecen un mayor rendimiento por litro de combustible, lo que los hace ideales para viajes largos y vehículos pesados.
Costes de mantenimiento
Mantener un motor diésel suele ser más caro debido a la robustez de su diseño y la necesidad de aditivos especiales y cambios de aceite más frecuentes.
Consecuencias de usar el combustible equivocado
Usar el tipo incorrecto de combustible en tu vehículo tiene consecuencias. Si pones gasolina en un motor diésel, el coche podría arrancar, pero pronto comenzará a experimentar un funcionamiento irregular, ruido excesivo y se acabará parando, pudiendo causar daños internos graves.
Por otro lado, si llenas un tanque de gasolina con diésel, lo más probable es que el coche ni siquiera arranque, ya que el diésel no se vaporiza ni se enciende adecuadamente con la chispa de las bujías.
En ambos casos, debes detener el vehículo y drenar el combustible incorrecto lo antes posible para evitar daños permanentes.
Conocer la diferencia entre diésel y gasolina y asegurarse de utilizar el tipo adecuado para tu vehículo no es solo una cuestión de mantenimiento, sino también una responsabilidad como conductor para garantizar el funcionamiento óptimo de tu coche y la seguridad en la carretera. Asegúrate siempre de comprobar el tipo de combustible antes de llenar el tanque, especialmente si estás conduciendo un vehículo por primera vez o si has alquilado un coche en un país extranjero.