La alerta ya ha comenzado a sonar. Las Zonas de Bajas Emisiones amenazan con convertirse pronto en terreno vetado para más del 80 por ciento de los vehículos que hay hoy en circulación en España, ya que en los próximos años solo los que cuenten con etiqueta ECO o Cero Emisiones de la DGT tendrán sus accesos siempre garantizados. Y, ojo, porque el Gobierno ya ha anunciado que prepara cambios en el sistema clasificatorio de estas etiquetas, y los coches nuevos podrían no tener tan sencillo como hoy obtener estas dos pegatinas medioambientales, por lo que el círculo de restricciones podría ampliarse aún más, incluyendo por ejemplo a los vehículos micro-híbridos.
Las Zonas de Bajas Emisiones se van a multiplicar este año en España
Pero eso de momento son especulaciones no confirmadas. Lo importante ahora mismo es que, a día de hoy, solo el 32% de las ciudades que están obligadas a contar con Zonas de Bajas Emisiones en España (recordamos que son todas las de más de 50.000 habitantes, así como territorios insulares y poblaciones con más de 20.000 habitantes con incumplimientos en materia de calidad del aire) las tienen ya activas, pero el 68% restante debe ponerlas en funcionamiento antes de que acabe el año si sus ayuntamientos no quieren verse expuestos a perder subvenciones estatales y ayudas al transporte público, tal y como ha amenazado el Gobierno.

Es decir, en solo unos meses, más de 150 ciudades, donde vive más del 60% de la población del país, contarán con estas ZBE con restricciones a vehículos, ya que el Gobierno también prepara un Real Decreto para obligar a los ayuntamientos a establecer un régimen sancionador, con multas reales y efectivas a los coches más contaminantes. La ley de Cambio Climático así lo exigirá y la movilidad sufrirá importantes limitaciones en España.
Y es que, si hasta ahora los vehículos afectados en todas estas Zonas de Bajas Emisiones ya en vigor son los de clasificación A, es decir, los que no tienen etiqueta medioambiental por su antigüedad y alta contaminación, el futuro inmediato comenzará a imponer también limitaciones de acceso a los vehículos de combustión más modernos: a todos los que no cuenten con etiqueta ECO o Cero Emisiones de la DGT.
Casi 10 millones de vehículos puede verse afectados por más restricciones de acceso a las ZBE
Si ayer mismo te contamos y detallamos ya cómo van a afectar estas restricciones a los vehículos con etiqueta B de la DGT, que serán los próximos en padecerlas, hoy nos detenemos en los de etiqueta C, que, aunque tendrán mayor período de uso, también comienzan a observar como ya hay ayuntamientos que anuncian prohibiciones para ellos. Estas restricciones serán muy importantes, ya que son los más numerosos del parque actual, calculándose que al menos acumulan el 35% de los vehículos que hay en circulación hoy en nuestras carreteras.

Casi 10 millones de vehículos por tanto, en concreto todos los turismos y furgonetas ligeras de gasolina matriculadas a partir de enero 2006, así como los turismos y furgonetas ligeras diésel matriculadas desde septiembre de 2015 y los vehículos de más de 8 plazas y pesados de gasolina o diésel matriculados desde 2014, sufrirán en los próximos años limitaciones de entradas también en muchas Zonas de Bajas Emisiones. Pero, ¿en cuáles?
Una decena de ayuntamientos confirma futuros vetos a los vehículos con etiqueta C
Comenzamos el recorrido de ayuntamientos que ya han confirmado próximas limitaciones a los vehículos con etiqueta C por La Línea de la Concepción, en Cádiz, que ha aprobado hace solo unas semanas un proyecto de Zona de Bajas Emisiones que, aunque incluirá solo una primera fase con prohibición a los vehículos sin etiqueta y una segunda donde extenderá la limitación a los de pegatina B, confirma ya una próxima tercera fase donde, desde 2028, en solo dos años y medio, los vehículos con etiqueta C tendrán también los accesos limitados.
Y no es el único ayuntamiento que ha decidido endurecer su ordenanza municipal reguladora de una ZBE. Getafe, por ejemplo, es otra importante ciudad que cuenta ya con una de las Zonas de Bajas Emisiones más restrictivas de España, confirmando también la restricción de acceso a este tipo de vehículos a partir ya de este mismo próximo mes de enero de 2026, salvo para estacionar en sus párkinson, limitando ya incluso toda entrada desde 2027, ni siquiera para aparcar en establecimientos públicos, un salvoconducto que casi todas las ZBE de España emiten en sus prohibiciones.

Antes incluso, ya en vigor, Madrid, también prohibió ya los accesos a los vehículos con etiqueta B y C en su específica ZBEDEP de Distrito Centro, salvo si quieren entrar para aparcar en un estacionamiento público. Otra ciudad que acaba de presentar un borrador donde ya incluye próximas restricciones de entrada a estos mismos vehículos es Huelva, que asegura que los de etiqueta C necesitarán autorización previa para poder acceder a su ZBE desde que entre en vigor en este mismo 2025, prohibiendo además aparcar dentro de sus plazas de aparcamiento.
Las Palmas de Gran Canaria, en las islas, y Estepona, en Málaga, también han iniciado los trámites necesarios para ejecutar nuevas ordenanzas municipales que indiquen el veto la entrada de todos los vehículos que no dispongan de etiqueta ECO o Cero Emisiones en áreas protegidas a lo largo incluso ya de este mismo año 2025. Y hay más aún…
Valladolid, por ejemplo, ha comunicado hace solo unas semanas que ampliará también las restricciones de acceso a su ZBE a los vehículos con etiqueta C de la DGT a partir del 1 de enero de 2030, lo mismo que Palma de Mallorca, que también desde enero de 2030 restringirá su paso a estos vehículos. Otra capital de provincia, como Cuenca, lleva incluso el plazo más allá, avanzando que desde 2038 impedirá también la circulación a cualquier vehículo diésel y gasolina.

Te hemos hablado ya de una decena de ayuntamientos que plantean futuras restricciones de acceso en las ZBE a todos los coches con etiqueta C de la DGT, pero conforme se vayan confirmando más áreas con limitaciones iremos, seguro, conociendo más. Y, aunque parezca en algunos casos muy lejano, para 2030 ya quedan menos de 5 años, por lo que las limitaciones afectarán a buena parte de los coches de gasolina y diésel que hay hoy en circulación por España.