La ampliación de 15 días del Estado de Alarma hasta el próximo 11 de abril pone ante nosotros nuevas dificultades. Ante los ya conocidos problemas de movilidad, hay quien dejará su coche parado, mínimo, durante un mes en el garaje o en la calle, lo que puede acarrear algunos problemas. Especialmente entre aquellos vehículos de más edad.
Como ya te hemos contado alguna vez, un coche puede sufrir algunas averías si no se utiliza regularmente o queda parado durante semanas enteras. Este será el caso de muchos vehículos cuyos dueños no los utilizan para ir al trabajo. Si formas parte de este grupo, lo mejor es que apliques los siguientes consejos si quieres evitar averías.
En primer lugar, si tienes ocasión de mover tu coche pero prevés que va a estar un tiempo parado, no es mala idea que pases por la gasolinera y compruebes la presión de los neumáticos. Lo mejor es poner un poquito más de presión que la recomendada por el fabricante, ya que poco a poco la irá perdiendo con el paso de los días. De todas maneras, como te decimos, sólo realiza esta acción si el coche va a estar parado unas semanas, nunca si se va a utilizar regularmente, ya que deberá llevar la presión indicada.
Una vez estacionado, tanto si tu coche está en un garaje como en la calle (más recomendable en este caso), es buena idea ponerle una funda que cubra la carrocería de los agentes externos, cuidando la pintura y los elementos exteriores. Los tubos de escape, por ejemplo, también es bueno cubrirlos. De esta manera nos garantizamos que no cojan óxido.
Y si tu coche duerme en garaje, ya que en la calle no es del todo recomendable, puedes aplicar otros dos trucos. El primero es no tensar el freno de mano, pues si éste lleva puesto durante mucho tiempo puede ser difícil de quitar cuando volvamos a utilizar el coche. El segundo es que dejes las ventanillas ligeramente abiertas para que las gomas no se peguen y el coche “respire", evitando malos olores o la creación de moho. También es buena idea dejar en el interior un recipiente con unos granos de arroz, ya que evitará que se formen humedades en el habitáculo.
Por último, para evitar un disgusto cuando vuelvas a coger el coche, lo mejor es que desconectes la batería. Primero quita el borne negativo y después el positivo. Cuando vuelvas a conectarlo realiza la operación en el sentido inverso: primero conecta el positivo y después el negativo. Esto evitará que la batería se descargue por no ser utilizada, lo que nos permitirá ahorrar unos euros.
Además, si tu coche está en un garaje o hay espacio suficiente en la calle, no es mala idea arrancar el coche unos minutos una vez a la semana y moverlo unos centímetros para que el peso no descanse siempre sobre el mismo punto de las ruedas y, así, evitaremos deformaciones en las gomas.