Volvo XC90 T8 Twin Engine, el adelantado a su tiempo

Si el XC90 fue el primer aviso de una nueva gama Volvo, su variante híbrida enchufable anticipa hoy su apuesta a la electrificación: 407 CV, 4x4 y 2,1 l/100 km de consumo.

Jordi Moral. Twitter: @jordimoralp

Volvo XC90 T8 Twin Engine, el adelantado a su tiempo
Volvo XC90 T8 Twin Engine, el adelantado a su tiempo

Puede que no sea el primer SUV híbrido del mundo con 7 plazas: ahí estaba antes un Range Rover Sport. Ni tampoco el primer SUV híbrido enchufable: para eso Mitsubishi lanzó su Outlander PHEV. Sin embargo, en Volvo sí presumen hoy de que su nuevo Volvo XC90 T8 Twin Engine, que ya admite pedidos y que llegará al mercado durante el primer trimestre de 2016 desde 79.950 €, es el primer SUV híbrido enchufable de 7 plazas del mundo. Quizá Volvo afine ya demasiado para presentar a este Volvo XC90 como un vehículo absolutamente revolucionario… pero en el fondo, y sin necesidad de ser pionero, lo es. Y lo es, por supuesto, para la marca, pero también lo es para el mercado: su ratio potencia/eficiencia resulta hoy inalcanzable gracias a sus 43 km de autonomía 100% eléctrica… y se ha adelantado a su gran rival Audi Q7.

Volvo XC90 T8 Twin EngineQueda claro pues lo mucho que representa ya para Volvo el XC90. Si ya se convirtió en el primer modelo de la nueva Volvo, y  en el primer integrante de una inédita plataforma modular escalable SPA, hoy este nuevo T8 Twin Engine anticipa toda una nueva estrategia en electrificación: para 2020 anuncia que estos modelos representarán más de un 10% de su volumen global. Sí, porque aunque antes llegó, y aún existe, un Volvo V60 D6 Twin Engine, la marca anuncia ahora que todos sus nuevos modelos apostarán a una variante híbrida enchufable, pero ya asociado a un motor de gasolina, descartando esa primera apuesta Diesel. No hay duda pues que muy pronto el protagonismo en Volvo se lo llevará un nuevo S90 (previsto para verano), una nueva familia de compactos (anuncio para 2017) y un modelo 100% eléctrico (estreno en 2019), pero mientras tanto al XC90 apuntan todos los focos. 

Volvo XC90 T8 Twin Engine: la técnica

Por tanto, hasta la central de Volvo en Gotebörg (Suecia) nos desplazamos para probar por primera vez este esperado Volvo XC90T8 Twin Engine. Encargado de estrenar una cadena híbrida enchufable, siempre de tracción total y que se asociará a todos sus nuevos grandes modelos partiendo del S60 (los más pequeños apostarán a una T5 Twin Engine más modesta, de tracción delantera y con motor gasolina de 3 cilindros), sus especificaciones son ya prometedoras. Con hasta 5 modos de funcionamiento promete ser un puro eléctrico, un gran híbrido, un poderoso SUV deportivo y hasta un buen todo terreno. 

Partiendo así de la base mecánica del XC90 T6, en gasolina monta un motor Drive-E optimizado, con compresor y turbo, 2 litros, 4 cilindros, 320 CV y 40,8 mkg de par máximo que, situado en el eje delantero, se encarga de mover las ruedas anteriores. Para complementarlo, un propulsor eléctrico de 65 kW (equivalentes a 87 CV) y 24,5 mkg de par se sitúa sobre el eje trasero para mover las ruedas posteriores, alimentado siempre por unas potentes baterías de ión-litio ubicadas sobre el túnel que recorre el habitáculo, desarrolladas en colaboración con LG y con 9,2 kWh de capacidad total. Se pueden recargar fácil en cualquier toma de corriente: en 2 horas y media con 16 amperios, en 3 y media con 10 y en 6 horas con 6 amperios. El conjunto se corona con su conocido cambio automático Aisin de 8 marchas y convertidor de par (con una bomba de aceite más grande) y con un motor de arranque de 34 kW para iniciar el motor de combustión cuando es necesario o ejercer de generador eléctrico. 

Con todo este arsenal, el Volvo XC90 T8 Twin Engine promete 407 CV totales combinados, un gran par máximo de 65,3 mkg, hasta 43 km de autonomía pura eléctrica, 2,1 l/100 km de consumo combinado según los ciclos de normativa europea y sólo 49 g/km de C02, todo un hito para un modelo que bordea las 2,3 toneladas (nos aseguran que las baterías proporcionan 120 kg extra) y con tanta potencia. Gran esfuerzo que incluso ha llevado a mejorar expectativas en Volvo sobre los 2,7 l/100 km y 59 g/km de CO2 que anunció en un primer momento. Visto sobre el papel un rendimiento excepcional, pero… ¿y en la práctica? Es lo que ya nos disponemos a comprobar. 

Volvo XC90 T8 Twin Engine: su respuesta

Con un interior tan lujoso y cuidado como cualquier XC90, arranco pues su habitual y original mando giratorio para echar pronto mano a la palanca de cambios…. y ésta no es una cualquiera. Sólo disponible en este híbrido enchufable, esta realizada en un exclusivo cristal de Orrefors con cada pieza hecha a mano con técnicas de corte y vidrio soplado. Una obra de arte que empieza por conquistarnos. Pero aún no levantemos las campanas al vuelo: hora comprobar su funcionamiento modo a modo.

Estreno pues este Volvo XC90 T8 Twin Engine cargado por completo de batería para saber lo buen eléctrico que es. Activo así a través de una ruleta en la consola central el primer modo PURE que fuerza su carácter de 100 por 100 eléctrico hasta 120 km/h. Pie al acelerador, par instantáneo y total silencio de marcha. No dejo de sorprenderme cómo semejante SUV, con 4,95 metros, es capaz de desplazarse con tan baja rumorosidad y tanto refinamiento. Poderío eléctrico que sólo se rompe si demandas momentáneamente picos máximos de aceleración (arranca el motor de combustión si considera que necesitas mucha potencia), pero que a poco que te impliques sin hundir el pie derecho te lleva a rodar muchos, muchos kilómetros en eléctrico, a buen ritmo y con prestaciones más que suficientes. Aunque Ideal sobre todo para entornos urbanos, en un uso mixto y sin ser todo lo cuidadoso que este tipo de vehículo pide, estiro su uso real eléctrico casi 25 km. Fantástica respuesta, donde si te implicas con sus hasta 5 etapas de frenada regenerativa (función B que se maneja con la palanca del cambio y que, usándola en progresión, te permite de manera anticipativa frenar por completo en ciudad sin usar el pedal de freno) puedes sacar mucho partido a la eficiencia. 

Así que, casi agotadas las baterías, toca comprobar ya su modo POWER, el más deportivo. Muy cómodo en la rodadura y bien aislado, es el momento en el que el Volvo XC90 T8 Twin Engine ofrece su mejor rendimiento combinado. La entrada del motor de combustión sorprende por su finura, casi inapreciable, y es entonces cuando aparecen sus más de 400 CV. Con mucho par abajo, es verdad que el cambio resulta algo lento entre la solicitud y la entrega de potencia, pero no empaña la respuesta de un SUV muy rápido y poderoso. Tanto, que oficialmente homologa un 0-100 km en sólo 5,6 segundos. Rendimiento dice Volvo de un buen V8… aunque también casi consumos: en este uso empezamos a ver ya más de 10 l/100 km en su gasto de combustible. Todo, evidentemente, no puede tenerse. 

Ya casi sin batería, la autonomía eléctrica marca sólo 5 km, así que activo su modo SAVE: teóricamente, “congela” el nivel de carga para emplearlo cuando considere el conductor (pensado sobre todo para sacarle el máximo partido a un posterior uso en ciudad), pero nos anunciaban que también era capaz de recargar. Diez kilómetros de buen uso y, nada, veo que siguen los 5 km de autonomía. Sólo los guarda: así que, a diferencia de otros sistemas de la competencia, compruebo posteriormente cómo sólo recarga una vez agotada por completo la batería, momento en el que llega a recuperar hasta 1/3 de su autonomía eléctrica. Sus ingenieros me confirman que es la decisión elegida para ser siempre lo más eficiente posible. 

Volvo XC90T8 Twin Engine: la conclusión

El recorrido toca a su fin por los alrededores de Gotebörg con la agradable sensación de estar ante un SUV muy bien hecho, excepcional. Nos ha faltado sólo poder comprobar mejor la respuesta en sus otros modos de uso: en HYBRID, donde el sistema gestiona automáticamente ambos tipos de propulsión para buscar siempre la mayor eficiencia posible; y en AWD, donde teóricamente seleccionas manualmente la tracción total continua (garantizada por ambos propulsores y sin necesidad de contar con un árbol de transmisión entre ejes) para convertir a este XC90 en un eficaz todo terreno. Pero en vehículos tan complejos, un solo día de pruebas no da para mucho más. 

Aun así, la carta de presentación de este Volvo XC90 T8 Twin Engine tiene el sello de calidad garantizado. Refinado, extraordinariamente eficiente si aprovechas al máximo su uso eléctrico, potente si lo necesitas, con una agilidad en marcha sobresaliente para su tamaño fruto de un bastidor muy afinado y en el que el conjunto híbrido no parece pasar excesiva factura y con el mismo espacio como 7 plazas que cualquier otra variante convencional del Volvo XC90 (sólo aumenta un poco el túnel central de las plazas traseras al alojar por debajo las baterías), resulta además un plug-in muy fácil de utilizar… donde sólo te costará, como en cualquier XC90, adaptarte a la ausencia de botones de una consola central que reserva la mayoría de funciones a su gran pantalla táctil vertical. Incluso contará con el sistema Volvo On Call, a través del que podrás precalentar o enfriar el habitáculo por control remoto, además de comprobar desde tu móvil el estado de la batería y de la carga. El futuro pinta pero que muy bien en Volvo. De hecho, sus responsables nos despiden asegurando que, en 4 años, este evolucionadísimo Volvo XC90 T8 Twin Engine será su modelo más veterano. Ver para creer. 

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