Es un coche que hace girar cabezas el nuevo Renault Mégane E-Tech Electric, quizás demasiado barroco en su frontal, y mucho más normal en vistas lateral y trasera sin perder aire estético de coche nuevo y moderno. Efecto wow cuando te acerques al coche y sus manetas delanteras asomen para permitirte la apertura, escondiéndose cuando te pones en marcha o abandonas el vehículo.
Así es el nuevo Renault Mégane E-Tech Electric
Es un coche este nuevo Renault Mégane E-Tech Electric que engaña porque quiere jugar a ser SUV en aspecto exterior y así se maquilla aunque mida 1,50 metros de alto -un Renault Captur sube a 1,57m con una longitud similar-. Pero si me tengo que quedar con algo es con su interior. Aunque no presuma de altura, la postura de conducción de este Mégane Electric es más elevada que en un compacto, algo a lo que obliga la ubicación de las baterías que también ayudan a rebajar el centro de gravedad. Más efectos wow: el que consigue la continuidad del enorme cuadro digital frontal con la pantalla central formando en conjunto una L que le da un aspecto muy tech al conjunto y reforzándose con una representación gráfica de informaciones con una puesta en escena llamativa, además de tener rápido funcionamiento y siendo todo bastante intuitivo.

Agradecemos que mandos importantes como los de la climatización tengan botones físicos para facilitar su uso. Volante grande y achatado por arriba y por abajo para darle en este caso un aire más deportivo y tras el que encontramos levas para gestionar cuatro niveles de retención de frenada -cuando te acostumbras, es adictivo jugar a cambiar para llegar a esa rotonda con la velocidad justa-. También quedan tras el volante el conmutador de cambio de marchas. Más detalles: materiales de buen aspecto al ojo buscando originalidad en los acabados aunque el plástico esté ah; visibilidad trasera floja si utilizamos el retrovisor convencional, aunque para solventar el problema puedes recurrir a un retrovisor digital conectado a una cámara trasera; detrás, piso plano sin excesivo espacio para rodillas, ni altura, ni anchura -recordamos que estamos ante un coche de 4,21 metros de largo y 1,50 metros de alto-. Y buen maletero el de este Mégane E-Tech Electric, sí señor, en cubicaje con 440 litros, muy hondo, con un hueco especial para guardar cableado, aunque no sea solidario con los asientos cuando los abatimos para formar un fondo uniformemente plano.
Renault Mégane E-Tech Electric: consumos y autonomía
Dinámicamente el coche es suave y silencioso cuando le pedimos un rodar de alfombra voladora en modo ECO -consumos muy ajustados de 14 kWh/100 km en un recorrido de un centenar de kilómetros con un desnivel de 350 metros- y aportando pimienta cuando nos movemos en los modos dinámicos -sus 218 CV ahí están junto a un chasis eficaz aunque todavía queda por ahí alguna pérdida de tracción a la salida de alguna rotonda y apretar con el pie derecho-. En modo ECO y yendo muy fino y sin prisas sí puedes acercarte a la barrera de los 400 km de autonomía -la marca anuncia 450 km-.

A ritmo de crucero ligero por autovía y sin rehuir elementos de confort, te tocará buscar un punto de recarga cada poco más de 200 kilómetros. Por cierto, sigue sin convencernos que en el modo Eco, el que muchos usarán casi exclusivamente, el coche se quede clavado en los 100 km/h. En caso de emergencia, si aprietas como un poseso el pedal derecho, entonces sí, se “autodesbloquea y tira”, pero tienes que conocer esta funcionalidad. Eso o cambiar de modo de conducción, algo que no siempre puedes hacer en un adelantamiento, por ejemplo.
Este Renault Mégane E-Tech que hemos probado con batería de 60 kWh y motor de 218 CV tiene un precio de salida de 40.000 euros. Hay una variante más modesta con batería de 40 kWh y motor de 140 CV desde 35.000 euros. Pero ojo, Renault ofrece hasta cuatro diferentes tipologías de cargador que debes tener en cuenta para elegir el que mejor se adapte a tus necesidades habituales, y que, lógicamente influirán en el precio final del coche. Si quieres conocer el coche en profundidad, no te pierdas nuestro vídeo.