Nueve glaciares de flujo rápido en la Antártida Occidental han sido nombrados por lugares de importantes tratados, conferencias e informes climáticos.
Uno de los glaciares a partir de ahora se llamará Glasgow Glacier, para homenajear a la ciudad que alberga la conferencia sobre cambio climático COP26. Todos los glaciares se encuentran en la región de Getz, que, utilizando datos de satélites, se descubrió recientemente que había perdido más de 300 gigatoneladas de hielo en los últimos 25 años.
Los nuevos nombres fueron aprobados por el Comité de Topónimos Antárticos del Reino Unido, y se agregarán al Nomenclátor del Territorio Antártico Británico para su uso en todos los mapas, cartas y publicaciones futuras
Solicitados por científicos de la Universidad de Leeds, los nuevos nombres fueron aprobados por el Comité de Topónimos Antárticos del Reino Unido, y se agregarán al Nomenclátor del Territorio Antártico Británico para su uso en todos los mapas, cartas y publicaciones futuras.
Glaciares de Getz nombrados para resaltar la crisis climática
Todo comenzó cuando investigadores de la Escuela de Tierra y Medio Ambiente de Leeds descubrieron que entre 1994 y 2018, todos los glaciares de la región de Getz aceleraron su deshielo, un promedio de casi un 25%, con tres de ellos haciéndolo en más del 40%.

Se han perdido 315 gigatoneladas de hielo en esta zona en los últimos 25 años, agregando 0,9 mm al nivel medio mundial del mar; el equivalente a 126 millones de piscinas olímpicas de agua
Además, revelaron que se han perdido 315 gigatoneladas de hielo en esta zona en los últimos 25 años, agregando 0,9 mm al nivel medio mundial del mar; el equivalente a 126 millones de piscinas olímpicas de agua.
Los científicos incluyeron datos de la misión Copernicus Sentinel-1 y la misión CryoSat de la ESA en su investigación, que también ayudarán a determinar si estos glaciares podrían colapsar en las próximas décadas y cómo esto afectaría el futuro aumento global del nivel del mar.
Esfuerzo sobresaliente de la comunidad científica
La investigadora de doctorado Heather Selley, de la Universidad de Leeds, fue quien solicitó que los nueve glaciares Getz sin nombre en su estudio llevaran el de las ubicaciones de los principales tratados, conferencias e informes climáticos.
Selley declaró: "Queríamos marcar permanentemente el esfuerzo sobresaliente que la comunidad científica ha puesto en medir el impacto actual del cambio climático y su evolución futura prevista. Nuestro estudio fue el primero en mostrar que los glaciares en esta remota región de la Antártida estaban acelerando su deshielo.
"Los glaciares se nombran en orden cronológico, con el glaciar de Ginebra marcando la primera cumbre climática en 1979, en el oeste de la región de estudio de Getz, y el glaciar de Glasgow marcando la COP26 en el este"
Para explicar posteriormente que "los glaciares se nombran en orden cronológico, con el glaciar de Ginebra marcando la primera cumbre climática en 1979, en el oeste de la región de estudio de Getz, y el glaciar de Glasgow marcando la COP26 en el este".

Los cambios dramáticos en el hielo de la Antártida se han convertido en sinónimo de la crisis climática. En los últimos 40 años, los satélites han observado enormes eventos de roturas de icebergs, cambios en el flujo de glaciares y regiones de hielo que adelgazan rápidamente, todo lo cual mejora nuestra comprensión de cómo ha cambiado la contribución de la capa de hielo al aumento del nivel del mar y proporciona evidencia esencial del impacto del cambio climático.
"La crisis climática nos afecta a todos, ya sea a través de inundaciones de nuestros hogares, aumento de la frecuencia de las tormentas, reducción de las cosechas de cultivos o la pérdida de hábitats y biodiversidad en el entorno natural, con algunas comunidades afectadas mucho más que otras”
Anna Hogg, profesora asociada en la Escuela de Tierra y Medio Ambiente de Leeds, ha afirmado al respecto: "La crisis climática nos afecta a todos, ya sea a través de inundaciones de nuestros hogares, aumento de la frecuencia de las tormentas, reducción de las cosechas de cultivos o la pérdida de hábitats y biodiversidad en el entorno natural, con algunas comunidades afectadas mucho más que otras”.
Celebrando el conocimiento adquirido
"Si bien estos nuevos nombres de glaciares celebran el conocimiento adquirido a través de la colaboración científica y la acción tomada a través de la política, ahora está claro que se debe hacer mucho más”, declaró posteriormente Hogg, quien añadió: “Me inspiran las huelgas escolares por el clima que nos recuerdan a todos que solo somos titulares temporales y tenemos la responsabilidad de proteger el planeta Tierra para la próxima generación. No hay duda de que hay una necesidad de acción urgente, tenemos una gran esperanza en el poder de la colaboración internacional, que puede permitir un progreso significativo en la COP26".

Por su parte, Mark Drinkwater de la ESA ha señalado que “de hecho, es apropiado que estos glaciares en la Antártida Occidental ahora lleven nombres directamente relacionados con la investigación climática y la formulación de políticas climáticas”.
Los glaciares recién nombrados
El glaciar Ginebra fluye en el extremo occidental de la plataforma de hielo Getz y lleva el nombre de la primera conferencia climática del mundo en 1979, como se ha apuntado anteriormente.
El glaciar del Río se encuentra más al este y conmemora la primera Cumbre de la Tierra en 1992, donde la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático se abrió a la firma junto con sus hermanas, la Convención de Río, la Convención de las Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica y la Convención de las Naciones Unidas para Combatir la Desertificación.
El glaciar de Berlín fluye más al este y lleva el nombre de la primera Conferencia de las Partes (COP) en 1995, que evaluó el progreso de la lucha contra el cambio climático. Marcó la unión del mundo para hacer frente al cambio climático y el acuerdo sobre un mandato para futuras negociaciones.

Aún más al este se encuentra el glaciar de Kyoto que conmemora la adopción formal del Protocolo de Kyoto en la COP3 en 1997, que vinculó legalmente a los países desarrollados a los objetivos de reducción de emisiones.
El glaciar de Estocolmo honra la quinta sesión de aprobación del informe de evaluación del IPCC en 2014. Éste representa la mayor reunión de científicos de la historia en ese momento
El glaciar de Bali marca la publicación del cuarto informe de evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) en 2007. Alrededor de este tiempo, la ciencia del clima entró en la conciencia popular. En la COP13, las partes acordaron la hoja de ruta de Bali, que trazó el camino hacia los resultados posteriores a 2012.
El glaciar de Estocolmo honra la quinta sesión de aprobación del informe de evaluación del IPCC en 2014. Éste representa la mayor reunión de científicos de la historia en ese momento.
El glaciar de París conmemora el acuerdo de un tratado legalmente vinculante en 2015 que tenía como objetivo limitar el calentamiento global a muy por debajo de 2 ° C, preferiblemente por debajo de 1,5 ° C, en comparación con los niveles preindustriales. Fue adoptado por 196 partes.
El glaciar Incheon marca la reunión del IPCC para considerar el informe especial sobre el calentamiento global de 1,5 ° C en 2015. Ésta fue la primera vez que los tres diferentes grupos de trabajo del IPCC lo hicieron juntos, para producir un documento de manera interdisciplinaria.
El glaciar de Glasgow marca la COP26 que se celebra en Glasgow, Escocia, Reino Unido. Sus principales objetivos son asegurar las emisiones netas cero globales para mediados de siglo, mantener el objetivo de 1,5 ° C al alcance, adaptarse para proteger las comunidades y los hábitats naturales, movilizar la financiación climática, trabajar juntos para finalizar el Libro de Reglas de París y acelerar la acción para abordar la crisis climática.