El Ford Mustang GTD ya había sido protagonista en nuestra web hace pocos meses, pero ahora vuelve a salir a la palestra porque los responsables de la marca han decidido certificar la potencia disponible para que no haya margen de dudas. Y de esta manera también acabaríamos en nuestros artículos sobre este espectacular deportivo con la coletilla de “tiene más de 800 CV”.
Bueno, pues según la certificación SAE de Estados Unidos este Mustang GTD tiene una potencia de… redoble de tambores por favor… 815 CV y un par motor de 900 Nm. Sin duda va a ser difícil sacarle más rendimiento al bloque V8 sobrealimentado de 5.2 litros que se esconde bajo su capó (esto en cuanto lo lea un ingeniero de Ford Performance se reirá, pues seguro que pueden superarlo).
Para Greg Goodall, ingeniero jefe del Programa Mustang GTD, se han centrado “desde el primer día en hacer del Mustang GTD el primer superdeportivo con prestaciones de primera clase y el alma de un Mustang”, sin pasar por alto un dato bastante importante “el corazón del GTD es su motor V8 sobrealimentado de 5,2 litros, con más caballos por litro que el Porsche 911 GT3 RS”.
Está claro que el objetivo era bastante claro y no han elegido un coche al azar, pues el 911 GT3 RS es uno de los deportivos de referencia del planeta. Para explicar un poco más esa afirmación, el alemán cuenta con un motor de 4.0 litros y 6 cilindros bóxer, atmosférico y con 525 CV de potencia. Sacando la calculadora nos saldría una relación caballos por litro de 131 CV/l, mientras que el Mustang GTD la deja en 157 CV/l.
Con estos datos, el GTD se ha convertido en el Mustang más potente de la historia. Para ello ha habido que mejorar el V8 incorporando por primera vez en el deportivo americano un sistema de lubricación en seco que en palabras de la marca lo “ayuda a estar lubricado en las curvas más exigentes”. Es hecho también ha permitido estirar el régimen de revoluciones hasta un máximo por encima de las 7.650 rpm, lo que son 100 rpm más que su antecesor.
Aunque hay más modificaciones en el excelso motor de Ford. Desde la marca nos cuentan que tanto la admisión como el escape han sido mejorados, fabricándose este último de serie en titanio para reducir el peso total, mientras que se incorporó una polea de sobrealimentación más pequeña para aumentar el rendimiento del propulsor.
Pero el tema de la potencia no es el único hito conseguido por este Mustang GTD. Gracias a sus 815 CV es capaz de alcanzar los 325 km/h (202 mph si lo prefieres), la cifra más alta para el deportivo y solo superado por el Ford GT dentro de historia de la marca. Para este menester se ha ayudado de un sistema de reducción de resistencia aerodinámica activa, capaz de variar el ángulo del alerón posterior o modificar los “flips” de la zona delantera.
Con los pedidos abiertos ya desde hace tiempo, que por cierto para España ya no quedan unidades disponibles, y las cifras técnicas certificadas ya solo queda cumplir con una de las promesas que publicó Ford en su publicación: quieren bajar de los siete minutos en el circuito de Nürburgring. Como detalle, el 911 GT3 RS lo dejó en 6:44.848 en 2022 con Jörg Bergmeister a los mandos.
