El SUV Citroën C5 Aircross, así como su versión híbrida enchufable, como el recientemente desvelado C4, y su versión cien por cien eléctrica ë-C4, cuentan ya con tecnología de conducción autónoma de Nivel 2 gracias al nuevo “Highway Driver Assist”. Esta función de ayuda a la conducción forma parte de un paquete compuesto por un total de 20 tecnologías en los coches franceses.
Gracias a la cámara situada en la parte superior del parabrisas y al sensor de radar del paragolpes delantero, el vehículo realizará un seguimiento eficaz de todo lo que sucede por delantera durante la conducción. De esta forma, se combinan el regulador de velocidad adaptativo, la función Stop & Go y la alerta activa de cambio involuntario de carril para que el conductor pueda delegar ciertas funciones de la conducción en el propio coche.

Con la nueva función “Highway Driver Assist”, el regulador adaptativo podrá mantener una distancia de seguridad con el vehículo de delante, gestionando automáticamente los frenos y el acelerador, sin necesidad de intervención del conductor en un rango de entre 30 y 180 km/h. El coche se puede detener por completo y reinicia la marcha de forma autónoma. Además, es capaz de corregir la trayectoria del vehículo gracias a la lectura de las líneas de la carretera, avisando al conductor si existe riesgo de cambio involuntario de carril sin haber encendido el intermitente correspondiente.
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Estas funciones son realmente útiles en diferentes situaciones: por ejemplo, en tráfico lento, donde los Citroën C5 Aircross y C4, con el cambio automático EAT8 instalado, y el ë-C4, podrán ir realizando las siempre molestas maniobras de acelerar y frenar repetidamente en los atascos. También se vuelven interesantes en situaciones de viaje por vías rápidas. El conductor tan solo tendrá que mantener las manos al volante, concentrado de la carretera, y podrá intervenir siempre que lo desee desactivando la alerta de cambio de carril, frenando o simplemente controlando el volante.

La nueva función “Highway Driver Assist” ya está disponible y de serie, de momento, en las versiones Shine del Citroën C5 Aircross. Una vez llegue la nueva generación del Citroën C4, con su versión eléctrica, lo veremos integrado también en su gama.