Pasan los días y la leyenda de Fleximan, el misterioso italiano desconocido que se dedica a destrozar los radares de velocidad con una radial, crece. De momento, las autoridades se han visto incapaces de atraparlo ni de descubrir su identidad, pero sus fechorías no solo continúan, sino que incluso se viralizan cada día más por las redes sociales.
Tras contarte esta semana su historia, hoy, gracias a la plataforma SocialDrive, podemos incluso comprobar en vídeo cómo actúa en su misión, eso sí, siempre totalmente camuflado para ocultar su identidad. Él mismo se hace llamar Fleximan y hasta deja ya mensajes a sus próximas víctimas, siempre radares en calles y carreteras de Italia.
El vídeo de Fleximan: así actúa
En las últimas horas, por ejemplo, se han podido ver amenazas a radares, con carteles donde, aún en pie los cinemómetros, Fleximan asegura junto a los postes que “Fleximan está llegando, y va a por ti”. En el mismo vídeo se pueden ver incluso escenas de cómo rompe y destroza varios de los 15 radares que de momento se contabilizan ya entre sus víctimas.
Fleximan 🦸🏼 Un justiciero italiano destroza más de 15 radares y la policía no es capaz de atraparlo pic.twitter.com/y0gZmXtv7n
— SocialDrive (@SocialDrive_es) January 31, 2024
De momento, la policía, incapaz de atraparle, investiga si los hechos están siendo causados por una sola persona o por distintos individuos que incluso se sospecha que podrían formar parte de alguna banda. El modus operandi es siempre el mismo, localizando el radar, destrozándolo hasta queda completamente fuera de servicio y con el poste cortado, y dejando una firma final con un cartel que reivindica sus acciones o advierte de futuras actuaciones.
Los primeros indicios sobre las acciones de Fleximan se detectaron en mayo de 2023, al ser los hechos grabados por cámaras de videovigilancia. Desde entonces, la policía le busca sin de momento haber conseguido ningún éxito. En este sentido, el propio coronel y comandante provincial de los Carabinieri en Padua, Michele Cucugielli, ha asegurado que “estamos trabajando en todos los frentes, sin descuidar el más mínimo detalle y colaboramos no solo con compañeros de otras provincias, sino también con las comisarías y policías locales de los territorios donde se cometieron los daños a los radares”.

Radares como hongos que deben hacer reflexionar a las autoridades
El problema es que Fleximan ha comenzado a tener la aprobación de los usuarios de redes sociales, que poco menos que lo consideran ya un héroe en Italia. Por este motivo, incluso el coordinador provincial del sindicatos de trabajadores de la policía local ha admitido que “con demasiada frecuencia, con la excusa de la seguridad vial, las administraciones municipales y provinciales han hecho que los radares parezcan hongos, colocándolos en los lugares más dispares, excepto donde realmente se necesitan, más para reponer las arcas de sus cuerpos que por un deseo real de reducir los accidentes de tráfico”.
Por ello, y a tenor de los grabaciones, esta misma autoridad considera que quizás “esta aprobación popular (a Fleximan) sirva para hacer reflexionar a determinadas administraciones sobre el uso y abuso de determinadas herramientas, así como sobre el uso correcto de la policía local, que merece algo mejor que se relegado al papel de cobrador de deudas”.