Tanto las nacionales, como también en siguientes pasos las regionales. El Gobierno ya prevé el próximo pago por uso de toda la red nacional de vías de alta capacidad, tal y como recoge el nuevo Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia enviado ya a Bruselas a través de un documento que recoge hasta 30 nuevas iniciativas que contarían con el visto bueno de la Comisión Europea.
La noticia, que ya te habíamos adelantado hace semanas, se confirma así definitivamente una vez que el Gobierno ha publicado su nuevo plan, que está previsto que hoy mismo detalle en una comparecencia oficial. Y quizá la medida más polémica de las contempladas será, sin duda, este nuevo impuesto por el uso de las carreteras, que está previsto que se aplique en España a partir del año 2024.
Autopistas, autovías… ¡y también carreteras nacionales!
En concreto, el documento enviado a Bruselas especifica la creación de “un pago por el uso de la red viaria de carreteras”. Este nuevo impuesto afectaría así a la red estatal de alta capacidad, es decir, tanto autopistas como autovías, pero abre también la puerta a que en siguientes pasos se extienda el peaje a todas las carreteras del país, tanto nacionales como regionales, tal y como consta en el Plan de Recuperación.

De momento, lo que sí parece descartarse es que este nuevo impuesto por el uso de carreteras vaya a afectar también a carreteras locales o comarcales, según han explicado a El País fuentes del Ministerio de Transportes, siendo una medida de aplicación exclusiva a vías de la red estatal. Eso sí, las nuevas tasas tendrán que pagarlas todos los usuarios, desde conductores particulares a transportistas.
Según estas primeras informaciones, el plan del Ejecutivo español es aplicar este nuevo pago en los 12.000 kilómetros de autovías y autopistas estatales, para luego extender el modelo a los 14.000 kilómetros de carreteras nacionales de un solo carril que conforman la red estatal. Posteriormente, se negociaría con las Administraciones autonómicas su implantación en vías de alta capacidad de su titularidad.

Las tarifas serán “asumibles”
El texto del Gobierno en concreto asegura que “prevé la posible articulación de un mecanismo de pago por el uso de las carreteras estatales que podría implantarse a partir del año 2024, buscando un acuerdo social y político, lo que supone avanzar hacia la internalización de los costes externos del transporte bajo el principio del cobro al “usuario pagador” y también del principio de que “quien contamina, paga”.
Según informa por último El País, el Gobierno admite que este nuevo peaje causará un rechazo generalizado, pero defiende que las tarifas que se impondrán serán “asumibles, pero que garanticen la financiación”.