El dato es muy, muy preocupante. De 3.797 vehículos controlados, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, así como los policías municipales que se sumaron a la campaña de vigilancia, emitieron un total de 3.334 sanciones. El porcentaje es altísimo y se ha registrado en solo 5 días reales de control, efectuados entre los pasados 18 y 22 de noviembre. Pero, ¿de qué tipo de vehículo hablamos?
No, no son furgonetas, en las que seguramente habrás pensado y que suelen estar a diario en la diana de la DGT sobre todo por sus condiciones laborales de reparto. No, en esta ocasión nos referimos a los autobuses escolares, sancionados en su gran mayoría por incumplir preceptos de la normativa que rige a este tipo de transporte de pasajeros.
En concreto, nada menos que el 48,7 por ciento de los autobuses escolares controlados, 1.852 vehículos para ser exactos, se llevaron alguna sanción de la DGT en la última campaña de vigilancia realizada el pasado mes de noviembre. Eso sí, a pesar de la preocupación que genera esta cifra, desde Tráfico aseguran que casi 6 de cada 10 denuncias formuladas corresponden en realidad a sanciones administrativas, como no disponer de la autorización especial para realizar las labores de transporte escolar o no tener suscrito un seguro de responsabilidad ilimitada, tal y como exige la ley. Desde luego, preocupa saber en qué condiciones viajan los millones de niños que cada día toman sus rutas escolares.

Otro dato de preocupación habitual sin embargo arroja buenas noticias, como es el uso del cinturón de seguridad en este tipo de transporte escolar. Es verdad que no todos estos vehículos los llevan incorporados, ni muchísimo menos, pero al menos las inspecciones de los agentes de Tráfico constataron que tan solo en 11 de los que disponían de este elemento de seguridad no se hacía uso de ellos por presentar anomalías en su funcionamiento.
Los controles efectuados durante solo 5 días constataron también que dos de los conductores controlados dieron positivo en los controles preventivos de alcohol realizados por los agentes, mientras que 18 de ellos lo hicieron en los test de drogas, una noticia también muy preocupante. Las cifras de la campaña se cerraron con otros 4 vehículos sancionados por incumplir los límites de velocidad.
Los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil comprobaron al mismo tiempo que hasta 144 vehículos de transporte escolar presentaba deficiencias en las puertas de servicio y emergencias, así como en sus dispositivos de accionamiento, mientras que otros 25 fueron denunciados por no tener al día la Inspección Técnica de Vehículos.
En lo que se refiere a la señalización obligatoria que este tipo de vehículos deben llevar, 144 de los vehículos controlados no llevaban la correspondiente señal V-10 de transporte escolar y otros 27 carecían del dispositivo luminoso con señal de emergencia.

Además, 52 conductores fueron denunciados por no llevar a bordo del autocar una persona encargada del cuidado de los menores cuando así procedía, otros 85 por exceso de tiempo de conducción o minoración del descanso y 3 fueron detenidos o imputados por un delito contra la seguridad vial.
La DGT confirma que ante este alto grado de incumplimiento de la normativa en este tipo de transporte continuará realizando controles y vigilancia para asegurar el correcto viaje de los menores y el óptimo estado de los vehículos. Urge modificar esta tendencia, sin duda.