El testigo del líquido refrigerante en el tablero de un vehículo es una advertencia que no debe ignorarse. Este indicador juega un papel importante en la prevención de daños potencialmente graves y caros al motor debido a problemas de temperatura.
A continuación, vemos qué quiere decir que este testigo se ilumine, las posibles causas de esta alerta y las acciones que se deben tomar para garantizar la seguridad y el funcionamiento óptimo del vehículo.
¿Qué indica el testigo del líquido refrigerante?
El testigo del líquido refrigerante es un icono en el tablero de mandos, generalmente representado por un termómetro o una figura similar, que se ilumina para alertar sobre una temperatura elevada del motor.
Este aviso es un indicativo claro de que el sistema de refrigeración no está funcionando correctamente, lo que podría llevar a un sobrecalentamiento del motor.
Razones comunes por las que se activa el testigo
Entre otras, estas son las razones por las que se puede iluminar el testigo del líquido refrigerante:
Fuga de líquido refrigerante
Si tienes una fuga de este líquido se reducirá la cantidad de líquido disponible para enfriar el motor, lo que impide que el sistema mantenga una temperatura operativa adecuada.
Fallo del sensor de temperatura
Un sensor defectuoso puede provocar una alerta falsa. Aunque el motor no esté realmente sobrecalentado, el sensor envía una señal incorrecta que activa el testigo.
Mantenimiento inadecuado
La falta de mantenimiento regular puede deteriorar la eficacia del líquido refrigerante. Con el tiempo, el fluido pierde sus propiedades de enfriamiento, lo que puede contribuir a un aumento de la temperatura del motor.
¿Qué hacer cuando se enciende el testigo?
- Detener el vehículo: Lo más prudente es detener inmediatamente la marcha y apagar el motor para evitar daños extras. Intenta aparcar el vehículo en un lugar seguro y esperar a que el motor se enfríe completamente antes de revisar cualquier componente.
- Revisar el nivel del líquido refrigerante: Una vez que el motor se ha enfriado, verifica el nivel del líquido refrigerante en el depósito. Si el nivel es bajo, es indicativo de una posible fuga o consumo excesivo.
- Acudir a un taller: Si detectas que el nivel de líquido refrigerante ha bajado o si el testigo sigue activo después de rellenar, es fundamental llevar el vehículo a un taller para una revisión, lo que garantiza la identificación y reparación de cualquier problema subyacente.
Consejos para mantener el sistema de refrigeración
- Revisión periódica del sistema: Realizar inspecciones regulares del sistema de refrigeración puede ayudar a detectar y solucionar problemas antes de que se conviertan en algo más serio.
- Cambio regular del líquido refrigerante: Los fabricantes de vehículos generalmente recomiendan cambiar el líquido refrigerante cada 40.000 a 50.000 kilómetros. Seguir estas recomendaciones puede prevenir problemas de sobrecalentamiento y mantener el sistema funcionando eficientemente.
- Uso de productos de calidad: Utilizar líquidos refrigerantes de alta calidad s asegura la protección adecuada del motor y del sistema de refrigeración.
El testigo del líquido refrigerante es una función de seguridad que ayuda a preservar la integridad mecánica y operativa de un vehículo. Prestar atención a este testigo y actuar de acuerdo con las recomendaciones puede prevenir reparaciones caras y prolongar la vida útil del motor. Asegurarse de que el sistema de refrigeración está bien mantenido y funcionando correctamente es fundamental para la seguridad en la conducción y la eficiencia del vehículo.