El intercambio de la batería como solución al problema de la recarga siempre ha estado presente para los fabricantes, si bien ha sido desechado o pospuesto por la mayoría de ellos, hasta ahora. El grupo Stellantis ha firmado un acuerdo con Ample, empresa estadounidense especializada en este tipo de tecnología. Su objetivo es integrar el intercambio de baterías en los vehículos eléctricos de Stellantis.
Esta tecnología de intercambio de baterías, denominada Modular Battery Swapping, permitiría al usuario de coche eléctrico cambiar su batería agotada por otra nueva en menos de cinco minutos, según afirman. Ambas compañías están también en conversaciones sobre la expansión de esta tecnología modular de intercambio de baterías en flotas y clientes en otras plataformas Stellantis.
La primera fase de pruebas tendrá lugar en Madrid en 2024, utilizando una flota de 100 Fiat 500e dentro del servicio de car sharing Free2move de Stellantis. Más adelante llegaría a otros modelos. Ample dispone de 12 estaciones en San Francisco y cuatro estaciones en Madrid, donde planea instalar casi una decena más.
Las baterías de Ample están diseñadas para sustituir directamente a la batería original de un vehículo eléctrico. Tienen la ventaja comentan que son baterías modulares y pueden caber en cualquier vehículo eléctrico. Permitirían a Stellantis, por lo tanto, integrar la tecnología de Ample sin necesidad de rediseñar sus plataformas.
Cómo funciona
Más ventajas. Las estaciones de intercambio de baterías de Ample se pueden instalar en zonas públicas en tan sólo tres días. Algo que da mucha agilidad al sistema. Su funcionamiento es sencillo. Cuando un vehículo eléctrico habilitado para Ample se acerca a la estación de intercambio, ésta lo reconoce inmediatamente. Una vez estacionado en el interior, el conductor inicia el cambio de batería a través de la aplicación móvil, obteniendo una batería totalmente recargada e instalada en su coche en menos de cinco minutos.
Esta tecnología se pondrá a disposición de los clientes de vehículos eléctricos mediante suscripción. Algo que reduciría el coste inicial del mismo. De esta forma el cliente se asegura que dispone de la última tecnología de baterías y no cargaría con una batería que se va degradando con el perjuicio de la reducción de autonomía. Ahora bien, habrá que ver cuál será el precio.
Un sistema, el de alquiler de batería que Renault ofrecía en el Zoe, y que puso fin hace unos años. Ahora bien, la marca del rombo o más bien la Alianza Renault Nissan fue de las primeras en contemplar el intercambio de baterías allá por 2008 cuando se asoció con Better Place con el Fluence ZE, con el sistema QuickDrop muy parecido al de Stellantis y Ample. Si bien la empresa que ofrecía este servicio quebró.