El camino de la electrificación en el mundo del automóvil es ya imparable. Si bien las cifras de ventas todavía están muy lejos de los objetivos que pretenden los fabricantes, la aparición y presencia de nuevos modelos y la infraestructura es cada vez mayor… ¡y lo que nos espera!
Tesla es, sin duda, la marca referencia en este sentido. El Grupo Volkswagen, referencia a nivel automovilístico mundial, arranca en este 2020 con su nueva familia ID y ya piensa en ponerse a la altura del gigante norteamericano en apenas tres años. “Si Tesla abre tres fábricas, podrá producir hasta 1,5 millones de unidades. Queremos lograr esa cifra para 2023, probablemente incluso antes”, ha reconocido el presidente del comité de empresa del Grupo VW, Bernd Osterloh.

Elon Musk visita Volkswagen en Alemania
Volkswagen se pone entre ceja y ceja ser un hueso duro de roer para Tesla en esta nueva década, pero no cabe duda que, en este terreno con tanto recorrido por delante, la colaboración entre fabricantes puede ser vital. Quizás la visita de Elon Musk, fundador de Tesla, a las instalaciones del Grupo VW, tenga este objetivo. Lo que sí sabemos es que, junto al CEO del consorcio alemán, Herbert Diess, Musk se ha podido subir al Volkswagen ID.3, el nuevo compacto cien por cien eléctrico de la marca.
Marcas como Tesla y Volkswagen tienen intereses comunes para que la tecnología de la electrificación dé varios pasos adelante. El fabricante norteamericano aterrizará muy pronto en Europa con su nueva Gigafactory 4 en Berlín, prevista para empezar a funcionar en 2021 (ya tienen fábrica en Reno y Buffalo, en EEUU, y en Shanghai, China), y quizás con nuevas factorías (España suena como posible ubicación futura). Por su parte, Volkswagen ya ha centralizado su fábrica de Zwickau para sus vehículos eléctricos; el SUV ID.4, que llegará en 2021, también se produce en China y lo hará pronto en Estados Unidos.

El negocio de Volkswagen va más allá de vender sus propios coches eléctricos, también pretende vender su plataforma modular a otros fabricantes, como Ford. Sabemos que Musk y Diess se han visto las caras en Alemania, previa invitación por parte de Volkswagen, ¿quizás para llegar a un acuerdo común?
Aparte de poder plantearse un posible intercambio de recursos en materia de plataformas, software y/o baterías, sigue siendo una necesidad prioritaria la potenciación de los puntos de recarga en las carreteras europeas para facilitar la movilidad eléctrica. Además, en las oficinas de Tesla también está sobre la mesa la llegada de un eléctrico de bajo coste, por debajo del Model 3. Motivos más que suficientes, todos los comentados, para pensar en una posible colaboración entre Tesla y VW.
Lo cierto es que la visita de Musk a casa Volkswagen ha sido fructífera. El jefazo de Tesla ha elogiado el VW ID.3, aunque ha querido resaltar algunos aspectos en los que sus coches destacan más, como la aceleración. Herbert Diess también ha tenido buenas palabras hacia Tesla, destacando su “rendimiento, conducción y autonomía”.