Las levas en el volante se han convertido en un elemento común en los coches automáticos modernos. Estas pequeñas palancas, situadas detrás del volante, permiten cambiar de marcha de forma manual sin usar embrague, ofreciendo mayor control y una experiencia de conducción más deportiva y precisa.
Su incorporación responde al deseo de mantener la sensación de control total que ofrecen las transmisiones manuales, pero con la comodidad de un cambio automático.
Cómo funcionan las levas en el volante
El funcionamiento de las levas en el volante es sencillo pero altamente eficiente.
Cada leva controla una acción distinta:
- La derecha (+) aumenta la marcha, proporcionando más velocidad.
- La izquierda (–) reduce la marcha, aprovechando el freno motor.
Al accionarlas, se envía una señal eléctrica inmediata a la transmisión, ejecutando el cambio casi sin retardo. Esto mejora la respuesta del vehículo, especialmente en conducción deportiva, curvas o descensos prolongados, donde el control sobre el régimen del motor es clave.
¿Levas fijas o solidarias? Descubre cuál es mejor para ti
Existen dos configuraciones principales:
Levas fijas
Están montadas en la columna de dirección y no giran con el volante. Son habituales en berlinas o SUV, y ofrecen una referencia constante para el cambio.
Levas solidarias
Giran junto al volante, lo que permite mantener las manos en la posición de las “3 y 9”. Son más comunes en vehículos deportivos o de altas prestaciones.
En ambos casos, mejoran la ergonomía y permiten cambios de marcha más rápidos y seguros, lo que se traduce en una conducción más precisa.
Ventajas de conducir con levas
Conducir con levas en el volante no solo aporta deportividad, sino también beneficios prácticos:
- Mayor control sobre la transmisión.
- Seguridad activa mejorada, ya que las manos permanecen en el volante.
- Posibilidad de aprovechar el freno motor en bajadas, alargando la vida útil de los frenos.
- Mejora del rendimiento y la eficiencia del motor, al mantener las revoluciones en el rango óptimo.
- Permite adaptar el estilo de conducción, alternando entre eficiencia o dinamismo según la situación.
Cómo usar correctamente las levas
Para utilizar las levas correctamente, pon la palanca en “D” (Drive) y comienza a conducir de manera normal.
Cuando desees cambiar manualmente:
- Usa la leva derecha (+) para subir de marcha.
- Usa la leva izquierda (–) para bajar.
El sistema evitará daños en el motor bloqueando el cambio si las revoluciones no son adecuadas. En conducción urbana o relajada, puedes dejar que el coche opere en modo automático, y activar las levas solo cuando quieras tener mayor control.
Levas en coches eléctricos: una nueva función
En los coches eléctricos, las levas no controlan marchas, sino el nivel de frenada regenerativa.
Al accionarlas, el conductor elige cuánta energía recuperar al soltar el acelerador o frenar:
- Más retención = mayor recarga de batería y frenada más intensa.
- Menos retención = conducción más fluida y cómoda.
Este sistema contribuye tanto a la eficiencia energética como a la seguridad activa, al adaptarse a las condiciones de la vía. Modelos eléctricos de última generación incorporan incluso varios niveles de retención ajustables con estas paletas.
Por qué vale la pena dominar las levas
Dominar las levas en el volante cambia la forma de conducir.
Permiten una respuesta inmediata del vehículo, aportan control, seguridad y una sensación de conexión directa con la mecánica.
Ya sea en un SUV, coche eléctrico o deportivo, su uso hace que la conducción sea más fluida, segura y divertida.
Son un claro ejemplo de cómo los sistemas de seguridad activa y confort evolucionan para ofrecer una experiencia más dinámica, adaptada a las nuevas tecnologías y a las preferencias de cada conductor.










