Es un hecho que el frío no sienta bien a los coches eléctricos. Tampoco a los térmicos que ven como su consumo se incrementa. En todo caso, la bajada de temperaturas hace que la batería de los eléctricos se agote antes y que el proceso de carga sea más lento. Pero no afecta a todos por igual. ¿Qué modelos pierden más batería con el frío?
Los vehículos eléctricos pierden alrededor del 30 por ciento de su autonomía de media cuando en el exterior hay temperaturas cercanas a los 0 grados, de acuerdo con un estudio de 18 modelos realizado por la compañía norteamericana Recurrent. En el estudio, -que incluye datos de más de 10.000 vehículos de todo EEUU que disponen de un dispositivo que proporciona datos sobre el uso de energía-, se concluyó que no todos pierden autonomía de la misma manera.

Recurrent comparó la pérdida de autonomía en temperaturas bajo cero con la de condiciones ideales. Es decir, a la que un modelo alcanza su mayor rango de autonomía. En el estudio se recogen todas las variables posibles, terreno irregular, velocidades de conducción variables, envejecimiento de las baterías… y muestran la expectativa promedio de la autonomía en condiciones de conducción en circunstancias reales.
Pues bien, según este análisis el Volkswagen ID4 fue el vehículo que más porcentaje de autonomía perdió con el frío, un 46 por ciento, mientras el que menos fue el Audi e-tron, menos de un 16 por ciento, según este estudio. Los Tesla se mueven en un 24 por ciento.
Modelo |
Pérdida de autonomía |
Volkswagen ID.4 (2021) |
48 por ciento |
Chevrolet Bolt (2017-2022) |
42 por ciento |
Ford Mustang Mach-E AWD Extended (2021) |
34 por ciento |
Nissan Leaf (2015) |
34 por ciento |
Hyundai Kona (2020-2021) |
34 por ciento |
Tesla Model S 90D |
28por ciento |
Tesla Model X 100D |
24 por ciento |
Tesla Model Y Long Range AWD |
24 por ciento |
Tesla Model 3 Long range |
24 por ciento |
Nissan Leaf Plus (2019) |
23 por ciento |
Audi e-tron Premium Plus (2021-2022) |
16 por ciento |
Calentar el habitáculo
Un factor que debemos tener en cuenta es que en invierno la autonomía de la batería puede caer de forma importante por la climatización. Y a menor temperatura exterior, mayor esfuerzo. Mientras los térmicos aprovechan el calor residual, los eléctricos tienen que utilizar la energía de la batería para “fabricar” ese calor. En todo caso, segun el estudio, los vehículos que cuentan con bomba de calor suelen responder mejor ante estas bajas temperaturas a la hora de climatizar el habitáculo que los que tienen resistencia.
Es fundamental, recuerdan desde Recurrent, preacondicionar el vehículo mientras se está cargando. Esta función está disponible en la mayoría de los vehículos eléctricos. Y una vez caliente el habitáculo bajar la climatización, pero sí emplear la calefacción de los asientos o del volante que consumen menos energía.
Reducir el tiempo de carga
Otro de los efectos del frío en las baterías es que tardan más en cargarse los vehículos. Para protegerse del frío muchos coches limitan el voltaje de carga cuando la batería está fría. Hasta que ésta coja temperatura. Muchos vehículos, si te diriges a un cargador con el sistema de navegación, preparan la batería para la carga. Esto te permitirá ahorrar tiempo en el cargador.