Uno de los principales gastos que tiene un coche una vez le compramos tiene que ver con eso de “llenar el depósito”. Está claro que algunos son más eficientes en este aspecto y otros parece que tienen un agujero por donde se escapa el combustible, pero casi todos, vamos ya quitando de esta ecuación a los eléctricos, pasan por esta rutina.
Y quizás en algún momento te hayas visto en esta situación. Has repostado al máximo el depósito de tu coche, quizás incluso en una estación que no suele ser la habitual, y la gasolina parece que se ha esfumado. Tú que sueles controlar siempre la autonomía, esta vez las cuentas no te cuadran nada. ¿Quizás me pudieron timar en la gasolinera?

Antes de que entres en cólera, tienes que calmarte porque esto no es algo que pase habitualmente en las gasolineras españolas. Todos los surtidores que podemos encontrar en las estaciones de servicio están homologados y calibrados de fábrica. Por si acaso, todos estos establecimientos deben superar una inspección por parte de un organismo homologado por la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC), de la misma manera que sucede que si se ha realizado una reparación. Y el propio Ministerio de Industria es el que establece los protocolos de la revisión, cuya desviación no puede superar el 0,5% del volumen.
Vamos a pensar que todavía con esta información no te has quedado tranquilo. Pues lo siguiente que debes conocer es que por ley tú mismo puedes comprobar si un surtidor está mal calibrado o en el peor de los casos, manipulado. De la misma manera que podemos solicitar una hoja de reclamaciones en cualquier negocio, también en una gasolinera puedes pedir una probeta de comprobación.
Como su propio nombre indica, este instrumento que es bastante común en los laboratorios y todas las gasolineras españolas deben tener uno en sus instalaciones para todos aquellos clientes que las pidan. Tiene una capacidad de 10 litros y suele estar marcada la desviación que permite la ley, que en este caso serían 0,05 litros. En el siguiente vídeo de la cuenta oficial de EasyGas puedes ver cómo se realizar una comprobación con probeta.
En caso de que después de realizar esta prueba de la probeta el resultado haya superado el porcentaje permitido por ley, como usuario tendremos el derecho de denunciar la situación ante la Policía Local o la Guardia Civil, lo que corresponda según la situación de la gasolinera. De esta manera el establecimiento se enfrentaría a grandes multas, que incluso pueden terminar en un cierre de la estación de servicio. Sin olvidar que como usuarios también podemos tomar medidas legales si no nos proporcionan la herramienta para medir la gasolina.